Durante el debate la constituyente María León propuso crear tribunales populares por estado para juzgar a los «traidores a la patria»
La asamblea constituyente despojó de su inmunidad parlamentaria al presidente de la Asamblea Nacional (AN), diputado Juan Guaidó, y autorizó al Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) para que prosiga el juicio en su contra.
«Queda autorizada formalmente la continuación del juicio, y que nuestra justicia, de acuerdo con la Constitución y la ley, se encargue de aplicar los mecanismos previstos», precisó este martes en la noche el presidente del organismo, Diosdado Cabello.
Guaidó, dirigente de Voluntad Popular (VP), es reconocido como presidente encargado de Venezuela por más de 50 países después de que el mandatario Nicolás Maduro se juramentara para un segundo periodo ante el TSJ el pasado 10 de enero.
El dirigente oficialista afirmó que la dirigencia opositora está feliz con la decisión de la constituyente, y sostuvo que el segundo vicepresidente de la AN, Stalin González, celebró la decisión de la Contraloría de inhabilitar a Guaidó por 15 años.
La constituyente María León presentó el punto para el debate y propuso que se creen tribunales populares, en cada estado del país, para que sea el pueblo el que diga qué hacer con los «traidores a la patria» como -según su criterio- lo es Guaidó.
A este planteamiento los constituyentes respondieron a gritos «paredón, paredón».
A juicio de León, el allanamiento de la inmunidad parlamentaria de Guaidó «es muy poco».
La constituyente Noris Herrera consideró que las acciones de Guaidó pueden considerarse crímenes de lesa humanidad.
«No nos van a doblegar», advirtió Herrera.
Ningún venezolano, y menos quien goza del voto popular como Guaidó, arrogarse el derecho de quitarle los servicios a la población, sostuvo la constituyente Tania Díaz.