HRW denuncia que venezolanos son víctimas de reclutamiento, homicidios y desplazamientos forzados en noreste de Colombia

Las autoridades colombianas estimaron que hay 9.106 venezolanos en el Catatumbo, aunque Human Rights Watch señaló que no fueron censadas todas las áreas rurales

El reclutamiento de menores, los homicidios y los desplazamientos forzados son algunos de los delitos que están sufriendo en la región colombiana del Catatumbo los venezolanos, las nuevas víctimas del conflicto armado, según un informe presentado este jueves por la ONG Human Rights Watch (HRW).

El estudio «La guerra en el Catatumbo: Abusos de grupos armados contra civiles colombianos y venezolanos en el noreste de Colombia» señala que en esa región están enfrentados desde el año pasado la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional (ELN) y un reducto del Ejército Popular de Liberación (EPL), considerado por el Gobierno como una banda criminal.

Allí también tienen presencia grupos de disidentes de las FARC, que al igual que el EPL y el ELN están cometiendo «numerosos abusos contra civiles» como asesinatos, desapariciones, violencia sexual, reclutamiento infantil y desplazamiento forzado, entre otros.

En esa zona, fronteriza con Venezuela, «es imposible» saber cuántos ciudadanos del país petrolero están radicados porque «la presencia del Estado es limitada y en algunas partes de esa región los grupos armados realizan controles en cruces ilegales».

Las autoridades colombianas estimaron que hay 9.106 venezolanos en el Catatumbo, aunque HRW señaló que no fueron censadas todas las áreas rurales y que la consulta se realizó cuando el EPL efectuó un «paro armado» en el que se prohibió el tráfico de vehículos, se cerraron todos los negocios y se suspendieron todas las actividades.

Por su parte, la Oficina de Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA) señaló que, hasta abril de 2019 por lo menos 25.000 venezolanos vivían en esa región, conformada por los municipios de Convención, El Carmen, El Tarra, Hacarí, La Playa, San Calixto, Sardinata, Teorama y Tibú.

Muchos de estos migrantes, constató la organización, viven en condiciones precarias, pues algunos «duermen en las calles o en edificios en condiciones de hacinamiento, a veces sin electricidad ni agua potable».

En los primeros seis meses del año, según cifras del Ministerio de Defensa mencionadas en el informe, 16 venezolanos fueron asesinados en el Catatumbo, tres menos que el total de homicidios registrados por la Policía en el 2018.

Estas cifras son graves si se comparan con las de 2017, año en el que hubo cinco casos, y 2016, cuando las autoridades no registraron el homicidio de ningún venezolano en esa zona.