Jorge Bergoglio se comunicó con el vicario general para la diócesis de Roma, el cardenal italiano Angelo De Donatis, para lanzar dicho proyecto
El Papa Francisco impulsó la creación de un fondo con una asignación inicial de 1 millón de euros, a fin de ayudar a los afectados por la crisis económica derivada de la pandemia de COVID-19.
«Una señal capaz de animar a todas las personas de buena voluntad a ofrecer un gesto concreto de inclusión, especialmente con aquellos que buscan consuelo, esperanza y reconocimiento de sus derechos», dijo.
Afirmó que con esta iniciativa se mitigará el impacto del virus en los trabajadores con contratos temporales, pagados por horas, empleados domésticos, pequeños empresarios y autónomos.