«Estamos frente a una guerra colonial y una situación muy peligrosa para toda la comunidad internacional», así lo afirma Romain Nadal al referirse al conflicto en Ucrania
El tema alimentario y energético forman parte de las prioridades que tienen en la agenda los países miembros de la Unión Europea frente a la crisis desatada por la guerra en Ucrania, según lo señala el embajador de Francia en Venezuela, Romain Nadal.
En el evento After Office, organizado por la consultora LOG Consultancy, el diplomático galo estuvo junto a Milena Lukasiewicz, Encargada de Negocios de Polonia en Venezuela, en donde conversaron acerca de la percepción de los gobiernos de estos países sobre el conflicto, amén de hablar como ciudadanos europeos.
Nadal señaló que «la invasión rusa nos hunde en el pasado» y agrega que esta acción atenta contra «Europa y toda la comunidad internacional».
Señala que en este conflicto está identificado claramente «el agresor» y su «clara intención de generar una crisis económica» que afectaría a todos los continentes y por ello uno de los esfuerzos más importantes de la Unión Europea apunta a un trabajo para la estabilización de los precios de los alimentos en el mercado internacional.
«Nos preocupamos de la crisis alimenticia es porque tiene un poder de desestabilización de las sociedades y de los países muy grave. Las explosiones sociales a causa del hambre son una realidad. La propia revolución francesa en 1789 comenzó por causa del precios de los cereales y no podemos jugar con eso. No podemos jugar con el hambre de los pueblos», sostiene Nadal.
-Los rusos tienen un arma de presión, más allá de lo militar, que está vinculada a la energía. ¿Qué hacen en este momento?
-Hay países europeos que son más dependientes que otros del gas o el petróleo ruso. No es el caso de Francia que tiene energía nuclear civil que cubre la mayor parte de nuestras necesidades de electricidad . Afortunadamente, eso nos da más independencia frente a las energías fósiles. Pero sí somos dependientes también porque no tenemos petróleo y gas y tenemos que importarlo. La Unión Europea está discutiendo de reducir sus importaciones de Rusia y se están acelerando los planes de transición ecológica de la Unión Europea y acelerando la búsqueda de otros proveedores que puedan compensar la producción rusa. El tema energético está muy presente en nuestras mentes.
En su exposición señaló que «esta es una guerra colonial. Con un país invadiendo a otro, cosa que creíamos había quedado en el pasado. Francia es un actor pacífico y ha decidido actuar desde la diplomacia y apoyando medidas como las sanciones, que son absolutamente legales».
«No queremos impunidad, pero creemos en el camino de la diplomacia y por eso armonizamos sanciones, diálogo y negociación», dijo el embajador.
Por su parte, la diplomática polaca habló sobre la tensión que vive el pueblo polaco al estar tan cerca del conflicto.
Señaló que la relación de Polonia con Rusia ha sido cambiante en el tiempo y en este momento se producen combates a 80 kilómetros de la frontera, que ponen en alerta a los polacos que viven en la zona.
Señaló que antes estas amenazas existe un apoyo de 2.000 soldados estadounidenses, que refuerzan a los militares polacos en la zona.
Al igual que Nadal, Milena Lukasiewicz, señaló que el gobierno polaco «tiene claro que existe un agresor en este conflicto y que sostienen el apoyo al pueblo de Ucrania.