El jefe de la diplomacia estadounidense, Mike Pompeo, quien se reunió la semana pasada a puerta cerrada con el alto funcionario chino Yang Jiechi en Hawái, dijo después de ese encuentro que consideraba a Pekín como un «actor deshonesto»
Estados Unidos endureció las reglas sobre otras cuatro empresas estatales chinas de medios, a las que denunció como distribuidoras de propaganda, renovando un conflicto con Pekín.
El Departamento de Estado dijo que China Central Television, China News Service, los periódicos People’s Daily y el Global Times serían considerados como misiones extranjeras en vez de medios de comunicación en Estados Unidos, empresas que se suman a otras cinco, también de origen chino, que fueron reclasificadas en febrero.
«Estas cuatro entidades no son canales informativos; son canales de propaganda», dijo a periodistas David Stilwell, el diplomático estadounidense de mayor rango para el este de Asia.
Las nueve compañías están «efectivamente controladas por el gobierno de la República Popular China», dijo Morgan Ortagus, portavoz del Departamento de Estado.
Con el cambio de estatuto, estas organizaciones deberán informar los detalles de su nómina de empleados en Estados Unidos y también sobre sus transacciones de bienes raíces a ese Departamento del gobierno estadounidense.
Su producción de noticias no será restringida, dijeron los funcionarios.
Con información de AFP