El petróleo de Texas bajó 1,59% y terminó la jornada en $63,58, mientras que el barril de Brent perdió 1,12% y cerró en $70,90
El precio del petróleo intermedio de Texas (WTI) bajó este jueves 1,59% y cerró en 63,58 dólares el barril después de que la Agencia Internacional de Energía (AIE) advirtiera que, de producirse una ralentización de la economía, el crudo se vería afectado por ello.
Al final de las operaciones a viva voz en la Bolsa Mercantil de Nueva York (Nymex), los contratos de futuros del WTI para entrega en mayo restaron 1,03 dólares respecto a la sesión previa.
El notable descenso del petróleo de Texas se produce después de alcanzar esta semana niveles máximos no vistos en los últimos cinco meses, y como reacción a un informe mensual del AIE, que advirtió que de momento la demanda de «oro negro» continua siendo la misma pero que podría verse afectada por una menor expansión de la economía.
La demanda de crudo cayó entre algunos países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo de la Economía (Ocde), entre ellos Australia, Canadá y Bélgica, en más de 300.000 barriles al día en el último trimestre de 2018, la primera caída de cuarto de año que ha registrado este grupo desde 2014.
El documento de la AIE sale a la luz después de que otro informe de la Opep mostrara un descenso marcado de la producción el pasado mes de marzo.

En Londres, por su parte, el precio del barril de petróleo Brent para entrega en junio terminó este jueves en el mercado de futuros de Londres en 70,90 dólares, un 1,12% menos que al finalizar la sesión anterior.
El crudo del mar del Norte, de referencia en Europa, concluyó la jornada en el International Exchange Futures con un descenso de 0,81 dólares respecto a la última negociación, cuando cerró en 71,71 dólares.
Los inversores recogieron beneficios tras la pronunciada subida que registró este martes el precio del Brent, impulsado por la caída de producción de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (Opep).
Las extracciones del cártel liderado por Arabia Saudí descendieron en marzo en más de medio millón de barriles diarios, casi el 0,5% de la demanda mundial.