En medio del impacto causado por una fotografía de los cuerpos sin vida de un padre y su hija ahogados en el Río Bravo cuando trataban de cruzar a Estados Unidos y las amenazas de Trump de desatar una «gran deportación», los temas migratorios seguramente tendrán más peso en la competencia por el poder
Al menos tres de los aspirantes a la nominación demócrata en las elecciones del 2020 decidieron acudir al centro para menores inmigrantes situado en Homestead, Florida, al sur de la ciudad, para expresar su rechazo a la detención de niños.
La aspirante y senadora por Massachusetts Elizabeth Warren dijo que lo que sucede a miles de indocumentados detenidos en la frontera con México, demuestra que se trata de un «mal momento de la historia» del país y que el «Gobierno debe reflejar los valores» estadounidenses, entre los que no está la detención de niños.
Aseguró que por eso decidió acudir al centro de detención de Homestead, donde están recluidos menores separados de sus padres y otros llegados sin acompañantes adultos.
Lo mismo hizo el congresista californiano y aspirante demócrata, Eric Swalwell, quien acudió a ese centro de detención y dijo que los menores que allí se encuentran recluidos necesitan «hogares y no prisiones privadas».
También anunció que acudirá al mismo lugar este jueves 27 de junio el excongresista por Texas, Beto O’Rourke, quien aseguró en su cuenta de Twitter que las políticas «inhumanas» del Gobierno del presidente Donald Trump, de separar a familias y mantener detenidos a menores «deben acabar».
Por su parte, el senador demócrata por Nueva Jersey, Corey Booker, en su cuenta de Twitter escribió «no es ningún crimen buscar una vida mejor» y que hay que «despenalizar» el cruce de la frontera.
El también aspirante, Julián Castro, fue el primero de los candidatos demócratas en presentar un plan migratorio que incluía la medida de despenalización, a la que se han ido sumando sus colegas y rivales, lo que probablemente saque a relucir durante su participación en el foro.