En palabras de la sierva de Dios: “Ha sido escogida Venezuela para una de las más altas misiones: la reconciliación de los pueblos y naciones. Ustedes se van a recordar, que no será otra palabra sino: reconciliación, reconciliación. Acuérdense»
La sierva de Dios María Esperanza Bianchini fue y, ahora más que nunca, es una figura crucial en la historia espiritual y social de Venezuela, especialmente por los tiempos de incertidumbre que se viven actualmente. Su mensaje de reconciliación y paz resuena en los corazones de quienes, en medio de la tormenta, buscan un rayo de luz.
El 25 de marzo de 1976 se manifestó por primera vez la Virgen de Betania y no se vislumbraba para entonces la magnitud e importancia de su mensaje. La sierva de Dios María Esperanza fue la figura central y la protagonista de las apariciones de la Virgen en Betania.
Ella nació el 22 de noviembre de 1928, en Barrancas, estado Monagas, Venezuela y desde niña tuvo una profunda espiritualidad y experimentó manifestaciones de la Santísima Virgen y del Señor, quienes le confiaron que algún día iba a obtener un terreno donde la Virgen se aparecería, y que este lugar se convertiría en el centro de una gran misión. Estas predicciones hacían referencia al Santuario de Betania que los esposos Bianchini encontraron 34 años más tarde. “Yo sé esto desde que era una niña, porque Jesús me habló de Betania cuando yo era una niña. . . Yo soñaba con esta tierra, y yo le decía: ‘Madre, quiero servir a Jesús,’” comentó la sierva de Dios en vida.
En palabras de la sierva de Dios: “Ha sido escogida Venezuela para una de las más altas misiones: la reconciliación de los pueblos y naciones. Ustedes se van a recordar, que no será otra palabra sino: reconciliación, reconciliación. Acuérdense«.
El 7 de agosto de 2004, la sierva de Dios María Esperanza de Bianchini, mensajera de la Virgen Reconciliadora de Todos los Pueblos, conocida también como la Virgen de Betania, partió de este mundo dejando un legado de esperanza y reconciliación. Para honrar su legado se realizaron actividades como un rosario, una misa y la presentación del libro «Relato de una Iglesia doméstica: Tertulia con los hijos de María Esperanza», el presbítero Ramón Vinke.
Más información en www.mariaesperanza.org y en el Instagram @betaniaorg