Leonardo Palacios lo describe como un «borrón y cuenta nueva» para que empresas, industrias y comercios puedan ponerse al día sin sanciones
La palabra perdón no siempre se asocia con la economía. Sin embargo, la propuesta que hace Leonardo Palacios, presidente de la Cámara de Comercio, Industria y Servicios de Caracas (Cámara de Caracas), une el perdón con los tributos.
«Estamos en un proceso de sobrevivencia impositiva los productores, comerciantes y, por supuesto, los consumidores», afirmó Palacios este jueves en conversación con contrapunto.com durante la presentación del libro «Cuando el tiempo se detuvo», de Editorial Dahbar.
«El Impuesto a las Grandes Transacciones Financieras, desde su entrada en vigencia, ha sido denunciado como un impuesto distorsivo e inflacionario. Quizá ayudó al gobierno a organizar los primeros pininos de una política de recuperación económica, pero ahorita se ha vuelto un obstáculo para lo que quiere el gobierno. El gobierno quiere la recuperación económica y esto genera estancamiento; el gobierno quiere reducir la inflación, y este impuesto mantiene la inflación y la presión alcista sobre los precios finales».
-Le pueden decir que han logrado frenar la inflación.
-No es a pesar del IGTF. Es el conjunto de una serie de medidas que al principio pudieron justificarse en el sentido de que jugaron a reducir la inflación y protegerse de la inflación, y el presidente lo dijo en 2018. Nosotros hicimos la crítica en cuanto a que redujeron el plazo de declaración del IVA, establecieron anticipos en materia de Impuesto sobre la Renta y en materia del impuesto al valor agregado convirtiendo los impuestos en impuestos a los flujos de caja; controlaron la banca con un encaje mortal porque no tienes financiamiento que genere posibilidad de expansión económica. Todas esas medidas, frente a la permisividad que ha existido por parte del TSJ y el Poder Legislativo sobre la voracidad fiscal municipal nos encontramos entrampados. Por eso decimos que estamos en la sobrevivencia impositiva.
-¿Qué puede hacer el TSJ y qué puede hacer la AN?
-Nosotros venimos proponiendo una ley de remisión tributaria. Una ley de amnistía tributaria. Es decir «borrón y cuenta nueva». La unidad tributaria per se no es mala, su variación debe hacerse conforme a la inflación, pero tratar de que de beneficie al contribuyente en el sentido de que su capacidad real, y no la nominativa producto de la inflación, sea objeto de gravamen. La UT se ha convertido en una unidad de sanción, para establecer medidas que llevan al cierre de las empresas, aumenta el índice de evasión fiscal que es absolutamente no deseable. Con esa circunstancia, con todo el incumplimiento producto de la pandemia, los apagones, la caída de los sistemas del Seniat y Tesorería vamos a hacer «borrón y cuenta nueva» y vamos a plantear una reforma tributaria.
-¿Cómo sería esa amnistía?
-Por un tiempo determinado. Supongamos que a partir de este momento, y hasta que termine el año, hay un proceso de remisión tributaria, para que la gente se ponga al día, para que la gente salga de la oscuridad de la evasión fiscal, cumpla a cabalidad con sus impuestos y que no haya sanciones. Que quienes han sido objeto de sanciones que han obligado a cerrar se pongan al día y olvidar las sanciones. Eso llevaría tranquilidad, certeza, seguridad en el proceso de recaudación. Adicionalmente generaría mayores ingresos para el Estado y buscaría las condiciones objetivas para un proceso serio de reforma tributaria.
-¿Qué tributos se perdonarían en este año?
-Fundamentalmente lo vinculado a retenciones y anticipos en materia de impuesto sobre la renta, impuesto a los patrimonios y a las grandes transacciones. Es un gran perdón de las sanciones, no de los tributos. Lo que me debes, págamelo. No te voy a sancionar. Y las sanciones pendientes en el Seniat o en tribunales deben ser objeto de esta remisión.
-¿Qué va a permitir?
-Exhortar al sector empresarial a sentarse a buscar los acuerdos necesarios para buscar esa reforma tributaria. También, buscar una sinceración del IVA. Hay boquetes que en el IVAS se crean con las zonas francas, puertos libres, que se han creado de manera irracional. Volver a un sistema de devolución. Establecer mecanismos reales y efectivos, no pasados de moda como las famosas máquinas fiscales, y establecer de manera concienzuda un cambio de paradigma, porque el empresario no es enemigo, no genera la guerra fiscal, no es evasor, y entonces ir a la factura electrónica. Este es el gran aporte de la tributación latinoamericana, que tiene un experimento con seguridad y efectividad en países como México y Ecuador. Venezuela está totalmente en la Prehistoria.
-¿Qué se necesita para la factura electrónica?
-Necesitamos internet permanente. Un desarrollo de TICS. UN elemento importante: que la gente pueda usar la contribución parafiscal incluida en la ley de ciencia y tecnología en el proceso de facturacion, en los sistemas de información. Que el gobierno reconozca el aporte. Gana el gobierno, ganan las instituciones, gana el contribuyente, gana el país.
-¿La reforma quedaría para 2024?
-Puede comenzar ahora. El superintendente Vielma Mora en 2004 hizo una propuesta de reforma importante, que era interesante, viable y aceptada por los técnicos y promotores de las finanzas públicas en Venezuela.
-¿Sería resucitar lo que ya hay?
-Resucitar e incorporar. La Academia de Ciencias Económicas, la academia de ciencias políticas, la asociación de derecho tributario, Fedecámaras, Conindustria, Consecomercio, la Cámara hemos hecho propuestas. No es criticar por criticar. No es decir que no queremos pagar impuestos. Hay que pagar impuestos, pero hay que eliminar la violencia -del Estado al cobrarlos, la confiscatoriedad en el establecimiento de las alícuotas y el solapamiento y el sálvese quien pueda que genera una tributación en la que hay una vorágine por parte de la autoridad nacional y una voracidad fiscal por parte de estados y municipios.
-¿La ley de armonización tributaria ayudaría?
-Pero no de la forma como se planteó. Debe ser objeto de una revisión. Hubo un grupo trabajando que logró avances. La ley de armonización no debe ser el desconocimiento de la autonomía municipal.
-¿Tenemos mucha informalidad?
-Demasiada informalidad. Y la informalidad es peligrosa, porque genera evasión y sin evasión no hay recursos. Genera descontrol, genera graves problemas en materia de seguridad alimenticia, la calidad del producto y desempleo.