El Gobierno chino dijo que apoya a sus compañías para que se defiendan de este último órdago que se enmarca dentro la disputa comercial
El gigante tecnológico chino Huawei aseguró este lunes que ofrecerá actualizaciones de seguridad a todos sus equipos después de conocerse que Google dejará de venderle componentes y software, mientras que el Gobierno de Pekín mostró su apoyo a la empresa para que tome «medidas legales y defienda sus derechos».
«Huawei ha hecho contribuciones sustanciales al desarrollo y crecimiento de Android. Como uno de sus socios clave globales, hemos trabajado estrechamente con su plataforma de código abierto para desarrollar un ecosistema que ha beneficiado tanto a los usuarios como a la industria», dijo la compañía en respuesta a la decisión estadounidense de limitar su aprovisionamiento y viabilidad.
Asegura el cable de la agencia AFP que la tecnológica china prometió que continuará proveyendo actualizaciones y servicios posventa a todos sus equipos, tanto «a los que ya se han vendido como a los que están aún en almacenamiento» y que seguirá construyendo un «ecosistema de software seguro y sostenible» para todos sus usuarios.
Entretanto, el Gobierno chino dijo que apoya a sus compañías para que se defiendan de este último órdago que se enmarca dentro la disputa comercial y tecnológica que el país mantiene con EEUU.
Reseña la nota de prensa de AFP que el portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores Lu Kang aseveró, en una rueda de prensa, que «China apoya a las empresas chinas para que tomen medidas legales y defiendan sus legítimos derechos».
Según fuentes citadas por Bloomberg, Alphabet, la empresa paraguas de Google, ha decidido cortar sus suministros de material informático y algunos servicios de programación al gigante chino siguiendo la emergencia nacional declarada por el presidente estadounidense, Donald Trump.
Igualmente, los principales fabricantes de procesadores, Intel, Qualcomm, Xilinx Inc y Broadcom, han informado a sus empleados de que, hasta nuevo aviso, dejarán de facilitar componentes a Huawei.
Google China explicó a The Beijing News que está «cumpliendo la norma» y «revisando sus implicaciones», aunque indicó que los usuarios actuales de teléfonos inteligentes de Huawei podrán actualizar sus aplicaciones, así como los servicios de Google Play.
La duda es qué pasará en el momento en que Google lance una nueva versión de su sistema Android, puesto que Huawei en principio no podrá ofrecer la actualización en sus teléfonos.
Kiranjeet Kaur, analista de IDC Asia-Pacífico, comentó este lunes 20 de mayo, al diario hongkonés The South China Morning Post que «La peor pesadilla que una empresa pueda imaginar es que se interrumpa su cadena de suministro».
También, He Tingbo, presidenta de HiSilicon, una fabricante de microprocesadores, aseguró la publicación económica china Caixinque que su empresa lleva «años» trabajando para afrontar un «escenario de supervivencia en condiciones extremas» con «planes de contingencia que podrían activarse de la noche a la mañana».
En una carta dirigida el viernes a los empleados y recogida por Caixin, HiSilicon asegura que los planes permitirán a la empresa continuar con su negocio en caso de que, algún día, no puedan adquirir chips y tecnología avanzada de Estados Unidos.
Por otro lado, el fundador y presidente ejecutivo de Huawei, Ren Zhengfei, indicó el sábado en una entrevista con la publicación japonesa Nikkei Asian Review que Huawei se ha estado preparando para el veto y «no va a tener problemas para funcionar sin chips estadounidenses».
Ren reconoció que Huawei «crecerá ligeramente a la baja» debido al veto, pero «Estados Unidos va a perder credibilidad al amenazar a sus socios de comercio».
Mientras, el rotativo oficial, China Daily, expresó que la decisión tendrá un impacto «limitado» en el mercado chino, puesto que la mayoría de los servicios que ofrece la empresa estadounidense tiene «alternativas» en competidores locales como Tencent y Baidu.
Las últimas decisiones sobre Huawei se esperaban desde que el pasado miércoles, cuando Trump declaró el estado de emergencia nacional para prohibir a las compañías estadounidenses hacer negocios con empresas que supuestamente intentan espiar al país ni tampoco usar los equipos de telecomunicaciones que fabrican.
Desde hace tiempo, EEUU insiste en la idea de que Huawei puede ser un instrumento del espionaje chino y hay instituciones, como el Pentágono, que tienen totalmente prohibido su empleo.
Además, el Gobierno estadounidense ha presionado a la Unión Europea (UE) para que también imponga restricciones a Huawei, que se encuentra a la cabeza del desarrollo de la tecnología5G.