Seguidores del oficialismo marchan desde las inmediaciones de la Plaza Morelos, en Caracas, hasta la Asamblea Nacional en rechazo a la retención del avión venezolano de Emtrasur en Argentina y por la liberación de su tripulación.
EL AVIÓN VENEZOLANO
El Boeing 747-300 fue detenido el pasado 6 de junio con 19 tripulantes, entre los que se encontraban, 14 venezolanos y cinco iraníes, pese a que el avión y la carga fuesen inspeccionados sin que se hallara nada de procedencia ilegal, ni se formulara acusación alguna contra la tripulación, sometida incluso a pesquisa con perros que detectan explosivos y estupefacientes.
El avión llegó a Argentina, procedente de México, haciendo escala en Venezuela, y dos días después partió para cargar combustible en Uruguay, pero tuvo que regresar al Aeropuerto Internacional de Ezeiza, en Argentina, porque el país vecino no autorizó su aterrizaje.
El avión, un Boeing 747 Dreamliner de carga, fue propiedad de la empresa iraní Mahan Air y actualmente pertenece a la Empresa de Transporte Aerocargo del Sur (Emtrasur), filial de Conviasa, empresas sancionadas por el Departamento del Tesoro de EE. UU.
¿QUÉ ALEGAN EN ARGENTINA?
La Corte del Distrito de Columbia pidió incautar el avión venezolano-iraní que está retenido en Ezeiza desde el 8 de junio pasado. Así se lo informó el Ministerio de Justicia de los Estados Unidos al gobierno argentino luego de que el 19 de julio se emitiera una orden judicial de ese distrito norteamericano alegando que la nave puede ser confiscada por haber violado las leyes de control de exportaciones locales por la transferencia no autorizada del avión de Mahan Air, una aerolínea vinculada al grupo terrorista Cuerpo de la Guardia Revolucionaria y a las Fuerzas Quds, hacia Emtrasur, la aerolínea de carga subsidiaria de Conviasa, la empresa estatal venezolana.
Según el comunicado del Departamento de Justicia de EEUU, desde el 2008 el Departamento de Comercio renueva todos los años una prohibición sobre Mahan Air para involucrarse en cualquier tipo de transacción que esté relacionada con commodities exportados desde Estados Unidos. Por eso, alegan en la orden de la Corte de Columbia, en octubre de 2021 la aerolínea iraní violó esta prohibición cuando pasó al control de Emtrasur sin la autorización del gobierno que conduce Joe Biden. Estas violaciones se profundizaron cuando entre febrero y mayo de 2022 Emtrasur permitió que la nave volara desde Caracas a Teherán y Moscú.