Una Constitución popular, un legado de democracia, una religión predominante, fuerza en la sociedad civil y vastos recursos naturales destacan como fortalezas. La fuerte polarización, una estructura de Gobierno unipartidista con capacidad de represión, instituciones debilitadas y grandes restricción a la prensa libre son las principales debilidades
Keith Mines, director para Venezuela del Instituto de Paz de los Estados Unidos, aseguró que en Venezuela no hay guerra o insurgencia y opinó que la disputa está centrada en el modo de gobierno y el sistema socioeconómico.
“En medio de la adversidad destacamos que esta nación tiene muchas fortalezas entre las cuales destacamos una constitución popular, un legado de democracia, una religión predominante, fuerza en la sociedad civil y vastos recursos naturales pero con una economía débil, lo cual promueve los deseos de cambio”, subrayó.
Mines destacó entre los retos o desventajas la fuerte polarización, una estructura de Gobierno unipartidista con capacidad de represión, instituciones debilitadas y grandes restricción a la prensa libre. “En el caso de este diagnóstico la debilidad abarca a todos los poderes públicos como el Tribunal Supremo de Justicia, Consejo Nacional Electoral, Presidencia de la República y la propia Asamblea Nacional; igualmente un éxodo importante de la clase media, aunado a la alta tasa criminalidad y violencia son obstáculos fundamentales para una resolución del conflicto en Venezuela”, indicó.
En medio de una fuerte tensión política y social agudizada por más de 70 días de cuarentena por la Covid-19 el Instituto de Paz de los Estados Unidos (USIP) bajo el auspicio de Unión por Venezuela realizaron un foro a través de la plataforma Zoom denominado “Innovación social para impulsar Soluciones Pacíficas”, con actores como Fedecámaras, Asamblea Nacional, ONGS como Provea, líderes sociales, académicos e iglesias.
Steve Hedge, director adjunto para América Latina del Instituto de Paz de los Estados Unidos, explicó que el USIP es una institución federal estadounidense encargada de promover la resolución y prevención de conflictos en todo el mundo “proporcionando investigación, análisis y capacitación a personas en diplomacia, mediación y otras medidas para la consolidación de la paz. Siendo una iniciativa del Congreso en 1984 declarándola oficialmente no partidista, independiente e imparcial”, dijo.
Hedge detalló que el instituto tiene presencia en 51 países del mundo, incluyendo Siria, Afganistán, China, Palestina, Israel, Corea del Norte; en América Latina son promotores y acompañantes del proceso de Paz en Colombia. “En el caso de Venezuela tenemos más de un año trabajando en el monitoreo y análisis de los acontecimientos políticos y sociales que ocurren en este país, lo cual ha permitido consolidar un marco de referencia propio sobre el conflicto; esto, con la intención de diseñar una propuesta de cooperación que se adapte a las necesidades de la crisis”.
Indicó que es inevitable no alarmarse con el escenario de confrontación regional y el uso de la fuerza planteado por los sectores radicales. “Sin detenernos a debatir sobre el origen y las causas del conflicto venezolano, consideramos que el sufrimiento de los venezolanos es una realidad que no puede ser ignorada por ningún sector; es por ello que los actores políticos están llamados a buscar una solución urgente que tenga como fin principal darles prioridad a los ciudadanos”, afirmó.
Rafael Curvelo, promotor de Unión por Venezuela, destacó que entre los participantes al encuentro resaltaron muchos actores de la vida nacional como: Ricardo Cusanno, presidente de Fedecámaras, la diputada a la Asamblea Nacional Fátima Soares, del campo de las organizaciones no gubernamentales, Rafael Uzcategui de Provea, Mariela Ramírez de Dale Letra y Feliciano Reyna de Acción Solidaria; por los líderes comunitarios estuvieron el periodista y expreso político Carlos Julio Rojas y Julio Cesar Reyes, dirigente social de Catia. “Asimismo actores de la academia, también estuvieron presentes en voz de Jesús Seguías y Egleé González Lobato o personas que fueron dirigentes dentro del chavismo, como el sociólogo Damián Alifa. Además el evento fue moderado por la activista política Indira Urbaneja”.