Unidos por la Dignidad (UPD) reitera que no tienen pertenencia política y que en el movimiento hay pluralidad y transversalidad «absoluta», pues los integrantes pueden ser personas que se identifican con cualquier corriente oficialista o de oposición
El naciente movimiento político, Unidos por la Dignidad (UPD), sale al ruedo político con firmeza ante la realidad venezolana y expresó su deseo de que para el año 2024 se consolide la unidad de todos los actores políticos a través de reglas igualitarias y no discriminatorias, en el marco de unas elecciones primarias.
La integrante del equipo promotor de UPD, Tamara Adrián, expresó que hay puntos que se deben cumplir para que una candidatura represente los intereses de todos los grupos que han sido excluidos.
«Donde todos los factores puedan participar. Creemos en dos vueltas y que pueda, de esta manera, el pueblo venezolano decidir el candidato o la candidata única para Venezuela», dijo.
Instó a quienes organizan la logística y mecanismo de primarias para que atiendan los requerimientos de unas reglas igualitarias y paritarias con posibilidad para todos los factores.
Expresaron que en UPD han estado observando y analizando los nombres de precandidatos para 2024, para cuestionar y determinar cuál será la posición del movimiento frente a esas candidaturas a primarias.
«Si vamos a apoyar a algunas de estas personas, para eso necesitaríamos que haya un compromiso absoluto con una agenda real de inclusión de todos aquellos grupos que han sido marginados o excluidos», agregó Adrián.
Diálogo
El movimiento manifestó su posición a favor de una solución negociada entre todos los factores como la única salida real a los problemas sociales y políticos que vive el país.
Consultados sobre el llamamiento del secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, para que Maduro y la Plataforma Unitaria sigan dialogando en la mesa de México, expresaron que deben estar representados todos los factores políticos de gobierno y oposición en una «negociación inclusiva».
«Eso implica hablar con los militares, hablar con las iglesias, hablar con los distintos candidatos, porque si hay algo que hemos aprendido es que es mucho más lo que nos une que lo que nos separa», apuntó Tamara Adrián.