El abogado defensor DDHH, Rafael Narváez, indicó que el Ministerio Público, el Poder Judicial y la Defensoría del Pueblo son responsables de la impunidad por su inacción e inobservancia de la violación sistemática de los DDHH en Venezuela
Las muertes de Franklin Brito, Fernando Albán y del capitán Acosta Arévalo, son una firme demostración que el Estado es el mejor aliado de la impunidad, según lo denunció este jueves 1 de julio el abogado defensor DDHH y coordinador de la defensa por los derechos civiles, Rafael Narváez.
Destacó que el Ministerio Público, el Poder Judicial y la Defensoría del Pueblo son responsable de la impunidad por su inacción e inobservancia de la violación sistemática de los DDHH en Venezuela.
«Los responsables de esta ilegalidad nunca son procesados penalmente, por el contrario son ascendidos en sus cargos y con aplausos de pie por la proeza en contra del ciudadano que expresa su descontento haciendo uso del art. 68 CRBV que le autoriza manifestar públicamente», dijo el también exparlametario.
Narvaéz señaló que tanto la Fiscalía General como el Poder Judicial tienen conocimiento de las atrocidades que comenten los cuerpos de seguridad como son las detenciones arbitrarias y el traslado a los centros de reclusión del Sebin de Plaza Venezuela, el Helicoide, la Dgcim y Ramo Verde.
A su vez, añadió que en los centros de reclusión «se inicia el calvario con la incomunicación a los detenidos, las torturas, tratos crueles e inhumanos y degradantes para arrancar una confesión, que por cierto es un método que la antigua defensora del pueblo Sra. Gabriela Ramírez lo justificaba».