El Rodeo «es el nuevo centro de tortura», afirmaron
Solo les permiten las visitas de familiares muy cercanos, y a quienes acuden al recinto penitenciario les vendan los ojos durante el trayecto hasta sus seres queridos. Esas visitas son a través de un vidrio y por 20 minutos, 10 minutos, o menos. Los presos permanecen en celdas pequeñas, que sus allegados describen como jaulas, con escasa exposición al sol. Así están unos 45 presos políticos que fueron trasladados desde el Helicoide y la Dirección de Contrainteligencia Militar (Dgcim) hasta la cárcel de El Rodeo, en Guatire (Miranda), tal como lo denunciaron sus familiares y defensores de derechos humanos. Se encuentran, aseguraron, peor que antes.
Civiles y militares, encarcelados por distintos expedientes, comparten la precariedad de las condiciones y la incertidumbre de no saber qué viene para ellos.
En rueda de prensa en la sede de la Apucv en Caracas, Andreína Baduel, hermana de Josnars Baduel, clamó nuevamente por la libertad. Recordó que su hermano fue detenido en perfecto estado de salud, y debido a las torturas a las que fue sometido ahora necesita al menos cuatro cirugías.
Thanicar Braz, hermana del capitán Antonio Sequea, detalló que en El Rodeo solo permiten las visitas de padres, hermanos y esposas, por lo que varios de los presos están prácticamente solos afrontando las necesidades que tengan.
Daniel Zambrano, padre de los jóvenes Juan Nahir David Zambrano (23 años) y Daniel Zambrano (28 años) se dirigió al mandatario nacional para solicitar la libertad de sus hijos. Juan Nahir es un joven autista, certificada por la propia Gobernación de Táchira, resaltó. Los dos muchachos se encuentran en la cárcel de Yare 2 desde hace dos años.
«Necesitamos tocar, ver cómo están nuestros familiares», indicó Jairo Bethermytt, padre del oficial Jairo Bethermytt, «porque me cuenta mi hijo que tiene dolores en la espalda, que las condiciones son inhumanas. «Pido a todas las instituciones que puedan colaborar».
«Mi hermano es estudiante del décimo semestre de ingeniería. No es ningún delincuente y merece ser tratado con dignidad. tanto él, como nosotros como familiares», subrayó Miliany Castillo, hermana del preso político Oswaldo Castillo, recluido en El Rodeo. «Mi hermano es víctima de una prisión injusta de cinco años y medio, y peor aún, sentenciado a 30 años de prisión sin ninguna prueba en su contra. No tienen pruebas en su contra porque sencillamente es inocente».
La Corte de Apelaciones ratificó, en los primeros días de abril, la sentencia de Castillo a 30 años de prisión.
A los presos «se les suministra poca alimentación», y todos «han bajado de peso», dijo Castillo. «Están totalmente incomunicados» y la visita, cuando la autorizan, es de 20 minutos y a través de un vidrio.
Como defensor de derechos humanos, Marcos Velazco afirmó que hay más de 270 presos políticos en Venezuela. «Compartimos una causa común, que es la liberación de cada una de estas personas que para el régimen significan una cifra, un número, pero para nosotros son vidas, son historias de familias que hoy están sufriendo el dolor de no tener a sus seres queridos cerca».
Velazco se refirió a los dirigentes de Vente Venezuela Henry Alviárez y Dignora Hernández, Emil Brandt, Luis Camacaro, presos en El Helicoide. «Dignora y Henry se mantienen aún sin comunicarse con sus familiares, sin que les permitan asistencia de sus abogados privados». Alviárez es «un hombre con una moral intachable, con una calidad humana reconocida» por la sociedad venezolana.