El PCV recuerda que «confesiones» y acusaciones hechas como resultado de torturas físicas y psicológicas no tienen valor probatorio y son nulas
El Partido Comunista de Venezuela (PCV) repudió este miércoles el encarcelamiento arbitrario y sometimiento del estudiante universitario, John Álvarez, detenido el pasado 30 de agosto y, de acuerdo con sus abogados, obligado a declarar bajo tortura para inculpar a activistas sindicales y políticos en supuestos actos de “conspiración”.
«De acuerdo a la denuncia hecha por el propio joven ante el tribunal, le fueron infligidas torturas físicas con la finalidad de arrancarle una admisión de los hechos que le imputan e incriminar a otras personas; procedimiento que evidencia graves violaciones a los derechos humanos, ejecutadas por las autoridades del Estado venezolano», reza una comunicación del PCV.
Los comunistas aseguran que en este caso al igual que en otros se viola flagrantemente la Constitución en su artículo 46, numeral 1, que dicta prohíbe los penas, torturas o tratos crueles inhumanos o degradantes.
«Llamamos a todo el pueblo trabajador venezolano a rechazar tales actos criminales y a luchar en amplia unidad de acción por la derrota de este repudiable plan de intimidación contra todos los que se oponen a las políticas antiobreras y antipopulares del Gobierno Nacional», agregan.
A juicio del PCV las acciones en contra del joven John Álvarez son una muestra del carácter antirrevolucionario y antisocialista de la administración de Maduro; y que lo confirman como un gobierno «autoritario y represivo, al servicio de las élites burguesas y corruptas».
El PCV exige libertad plena e inmediata para todos los ciudadanos detenidos injustamente, así como reparación para las víctimas de las violaciones a su integridad física y moral.