Inicialmente los funcionarios negaron la magnitud del problema, aun cuando Acnur calcula que hay más de 4,7 millones de personas refugiadas y migrantes de Venezuela en todo el mundo. Hoy, cuando migrantes venezolanos deciden retornar al país, los acusan de ser «armas biológicas» enviadas por el presidente colombiano Iván Duque
Para el gobierno de Nicolás Maduro el éxodo de venezolanos nunca existió. La migración forzada se convirtió en tema de debate en foros internacionales, Naciones Unidas designó un enviado especial y los países vecinos alertaron sobre las condiciones en que llegaban los venezolanos a sus territorios. No obstante, el problema no fue tal para los funcionarios, que planteaban que se estaba exagerando.
La Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur) calcula que hay más de 4,7 millones de personas refugiadas y migrantes de Venezuela en todo el mundo. Argentina, Brasil, Chile, Colombia, Costa Rica, Ecuador, México, Panamá, Perú y el sur del Caribe son los países de acogida de esta migración.
«Las personas continúan saliendo de Venezuela para huir de la violencia, la inseguridad y las amenazas, así como la falta de alimentos, medicinas y servicios esenciales. Con más de 4 millones de venezolanos y venezolanas que se encuentran viviendo en el exterior, la gran mayoría en países de América del Sur, este es el éxodo más grande en la historia reciente de la región», reporta Acnur.
El 4 de septiembre de 2018 Maduro dio sus números: “Claro que un grupo de venezolanos, producto de las guarimbas (disturbios), de la violencia, de la agresión, del bloqueo financiero del gobierno de Estados Unidos (…), quisieron probar suerte en el exterior y más del 90% están arrepentidos, de un grupo que no pasa de 600.000 venezolanos que han salido en los últimos dos años”.
La vicepresidenta Delcy Rodríguez manifestó que el gobierno se comunicó con el secretario general (de la ONU), Antonio Guterres, “para manifestar nuestra preocupación de que funcionarios de forma aislada estén prestándose” para “convertir un flujo migratorio normal en una crisis humanitaria justificadora de una intervención”
La COVID-19 ha hecho que una parte de ellos regrese al país en busca de mejores condiciones de vida. El ejecutivo de Maduro implementó medidas en la frontera, como cuarentena antes del regreso a sus zonas de origen.
El pasado 20 de mayo Maduro acusó a Duque de ordenar contagiar a los migrantes venezolanos. “Esa es la orden que ha dado Iván Duque en una reunión infausta, dando órdenes para que se logre contaminar de coronavirus a Venezuela”, denunció.
Según su versión, mientras algunos migrantes caminaban para regresar al país de pronto aparecieron autobuses y vehículos para llevárselos a la frontera. “De un momento a otro los montaron en vehículos, autobuses, les dieron bolsitas con pancitos. Ellos dice que estaban sanos en las ciudades de Cali y Medellín, que no habían tenido contacto con contagiados y presumen que los contaminaron en los autobuses”, reseñó Venezolana de Televisión.
Por si fuera poco, el secretario de gobierno de Zulia, Lisandro Cabello, calificó a los migrantes retornados de «armas biológicas», como lo denunció el periodista venezolano Gabriel Bastidas.