La Comisión Delegada advirtió que no se reconocerán las inversiones de particulares en el área protegida
La Comisión Delegada de la Asamblea Nacional aprobó un Acuerdo para rechazar el anuncio del régimen de Nicolás Maduro, de construir una ciudad comunal en el Parque Nacional El Ávila.
El documento, aprobado este martes en sesión ordinaria, anticipa y advierte la sujeción a nulidad absoluta e inexistencia consecuente de todo cuanto se desprenda de esta eventualidad, reitera el no reconocimiento de inversiones, las consecuentes acciones penales para los perpetradores de delitos contra el ambiente y la necesaria demolición sin reembolso de cualquier obra que se levante en el pulmón verde de la capital.
También se denuncia ante el país alteración del orden constitucional y democrático por parte de la ilegítima Asamblea Nacional del Proyecto de Ley de las Ciudades Comunales contrario a la Constitución Nacional y a la voluntad del pueblo venezolano expresada en referéndum constitucional del año 2007.
El instrumento legal exhorta a los venezolanos a movilizarse para manifestar el más enérgico repudio y a desplegar acciones que contribuyan a poner freno al desmantelamiento de la democracia y del Estado de derecho.
El Acuerdo será remitido a la oficina del Fiscal de la Corte Penal Internacional que lleva el caso Venezuela, con la finalidad de que sea incorporado al expediente de denuncias contra el régimen de Maduro, así como a la Organización de las Naciones Unidas, a la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos y al Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente, debido a las devastadoras consecuencias de la ejecución de la pretensión del régimen sobre el Parque Nacional El Ávila.
La presidenta de la Comisión Permanente de Ambiente, Recursos Naturales y Cambio Climático de la AN, diputada María Gabriela Hernández, señaló que a través del Acuerdo se expresa la indignación, pero a su vez, el coraje de una ciudadanía harta.
Indicó que tanto la Constitución del año 1.961 como la aprobada en 1.999 recogen la vocación del venezolano en cuanto al respeto, cuido, estudio y el sostenimiento de la naturaleza y los recursos.
La parlamentaria denominó la construcción de la ciudad comunal en El Ávila como una aberración y llamó a la ciudanía, principalmente a los mirandinos y varguenses, a organizarse para contener la nueva idea “depravada del dictador”.
La legisladora por el estado Mérida, Mildred Carrero, manifestó que pretenden instaurar un régimen comunal mediante una figura inconstitucional denominada ciudades comunales.
Carrero sostuvo que todas estas ideas están bajo un esquema ortodoxo, marxista y leninista, que tiene como objetivo desarrollar un nuevo mecanismo de participación ciudadana, pero en la realidad es una estructura paralela de solapamiento y sustracción de las competencias publicas atribuidas a los poderes públicos municipales, estadales y luego nacionales.
Para culminar el debate, tomo la palabra la diputada por el Distrito Capital, Tamara Adrián, quien señaló que este último pronunciamiento por parte de Maduro es un señuelo más. “No caigamos en la trampa, el objetivo nuestro es muy claro, es la unidad, es denunciar los alacranes. La razón es muy sencilla, por teoría de juego un actor unido contra múltiples actores divididos va a ganar siempre en condiciones de dominación. No perdamos el norte, porque el norte es la unidad, es la democracia”.