El corte de carreteras y las inundaciones provocadas por el tifón están dificultando las tareas de los equipos de rescate en islas como la de Siargao, que ha quedado muy dañada debido a las inundaciones
El tifón Rai, que llegó a Filipinas el jueves y salió este sábado del país, ha dejado al menos 31 muertos y más de 328.000 desplazados en la zona central del archipiélago, informó este sábado la agencia de desastres.
En su último informe, el Consejo Nacional de Gestión y Reducción del Riesgo de Desastres (NDRRMC, siglas en inglés) señaló que de los desplazados solo 2.283 se encuentran en centros de evacuación, mientras que hay 193 localidades sin electricidad y 22 carreteras dañadas.
Los daños, inundaciones y corrimientos de tierra provocados por el tifón también han cortado las telecomunicaciones en 222 localidades, mientras que hay 22 carreteras afectadas.
El embate del tifón, conocido como Odette en el país y el decimoquinto en llegar a Filipinas este año, ha pasado por unas nueve islas donde ha arrancando los techos y provocado daños en numerosos edificios.
El tifón, que tocó tierra el jueves con vientos de hasta 240 kilómetros por hora, bajó la intensidad este sábado con vientos de hasta 185 km/h y salió de Filipinas hacia el mar de China Meridional, según la agencia de meteorología PAGASA.