Las fallas fueron halladas en tres tipos de áreas distintas en el tramo que incluye la zona de la tragedia del pasado 3 de mayo
El Gobierno de la Ciudad de México informó este miércoles que fueron halladas 21 grietas en la estructura metálica del tramo elevado de la línea 12 del metro, tras una inspección a detalle elaborada por especialistas en ingeniería.
La tragedia ocurrió el pasado 3 de mayo, cuando se derrumbó un puente elevado de la línea, en la alcaldía Tláhuac, en el sur de la capital mexicana, por lo que el vagón cayó sobre la carretera y quedó encallado en forma de «V», dejando 26 muertos y un centenar de heridos.
El descubrimiento sobre las 21 nuevas grietas se generó después de que un peritaje de la Fiscalía de Ciudad de México determinara que los diafragmas —estructuras que proporcionan rigidez a las trabes— del tramo colapsado presentaban grietas generadas por un fenómeno de desgaste conocido como «fatiga por distorsión inducida».
Tanto el peritaje de la Fiscalía como un informe independiente encargado por el Gobierno de Ciudad de México a una empresa noruega concluyeron que el accidente se debió a una «falla estructural» de la construcción.
Sin embargo, el hallazgo de las fallas en el tramo llevó a la administración local a inspeccionar a fondo el tema de las grietas.
«Es una inspección detallada, especializada. En su momento se hizo la inspección por parte del colegio de ingenieros civiles de todo el tramo (…) en una inspección regular es imposible detectar», indicó en conferencia de prensa Jesús Antonio Esteva, secretario de Obras de capital.
Dicha inspección, quedó a cargo de especialistas en ingeniería de la Universidad Autónoma de Nuevo León (UANL), cuyos resultados serán considerados en las obras de rehabilitación y reforzamiento de la línea.