A la movilización, en la que participaron movimientos indígenas de Guatemala, también se unió Edmond Mulet, excandidato a la presidencia por el partido Cabal, y Roberto Arzú, por el partido Podemos
Este jueves 7 de diciembre el presidente electo de Guatemala, Bernardo Arévalo y la vicepresidenta electa, Karin Herrera, salieron a las calles en una marcha por varios puntos de la capital «en defensa de la democracia», puesto que consideran que hay una escalada de ataques para impedir que asuman el poder el próximo 14 de enero.
«Hoy marchamos en unidad por este país que va a florecer a pesar de los corruptos», dijo Arévalo, al iniciar la movilización que partió desde la plaza de los Derechos Humanos, frente a la Corte Suprema de Justicia, hacia la Corte de Constitucionalidad y el Ministerio Público.
«Somos un pueblo al que las autoridades políticas nos han traicionado porque nos han dividido para poder establecer regímenes que solo sirven a unos pocos y que marginan y discriminan a todos», agregó Arévalo.
A la movilización, en la que participaron movimientos indígenas de Guatemala, también se unió Edmond Mulet, excandidato a la presidencia por el partido Cabal, y Roberto Arzú, cuya candidatura a la presidencia por el partido Podemos fue anulada luego de que la Corte de Constitucionalidad rechazara los recursos que había interpuesto contra la decisión del Tribunal Supremo, que consideró que Arzú había hecho campana electoral anticipada.
Fuente PL/CNN