La sede del movimiento Chabad Lubavitch, una congregación ortodoxa mesiánica muy fuerte de judíos en Estados Unidos, fue objeto de escenas de caos y destrucción. El edificio de Nueva York acogió un conflicto entre diferentes grupos de judíos y la policía.
La extraña historia se refiere a una serie de túneles que fueron excavados dentro del edificio de la sinagoga. Estos túneles subterráneos conectarían con otras partes de la sinagoga además del centro de oración, además de salir a las calles de Nueva York. La información es de The Times of Israel.
Según los informes, los caminos fueron construidos por jóvenes del movimiento Jabad, llamado Bochurim, debido a los cierres de 2020 y 2021 provocados por el Covid-19. A través de ellos sería posible acceder al templo sin tener que pasar el control de seguridad. Sin embargo, la policía todavía está investigando los pasajes.
Las excavaciones fueron denunciadas por un vecino de la sinagoga y, entonces, la élite del movimiento Jabad decidió hormigonar los túneles y cerrar los pasajes.
Algunos de los bochurim, enojados, comenzaron a destrozar la sede de Lubavitch para evitar que los túneles quedaran completamente sellados.
La policía arrestó a algunos de los manifestantes.