El funcionario fue ingresado en el Centro Médico Militar Nacional Walter Reed por «un problema emergente de la vejiga».
Lloyd Austin, secretario de Defensa de Estados Unidos, volvió a ser hospitalizado, informó este 11 de febrero el portavoz del Pentágono, Patrick Ryder. De acuerdo con sus declaraciones, Austin «fue transportado por su equipo de seguridad al Centro Médico Militar Nacional Walter Reed para ser examinado por síntomas que sugieran un problema emergente de vejiga».
Asimismo, detalló que en esta ocasión ya «se ha notificado a la subsecretaria de Defensa y al presidente del Estado Mayor Conjunto», así como a la Casa Blanca y al Congreso, sobre la hospitalización del jefe del Pentágono.
«En este momento, el secretario conserva las funciones y deberes de su cargo. La subsecretaria [Kathleen Hicks] está preparada para asumir las funciones y deberes del secretario de Defensa, si así se requiere. El secretario Austin viajó al hospital con los sistemas de comunicaciones clasificados y no clasificados necesarios para desempeñar sus funciones», destacó Ryder.
El portavoz del Pentágono aseguró que el organismo proporcionará «una actualización» sobre el estado de salud de Lloyd Austin «lo antes posible».
Hospitalización secreta
Austin, de 70 años, fue dado de alta a medianos de enero, después de ser hospitalizado por dos semanas para tratar las complicaciones que surgieron tras una operación de cáncer de próstata que mantuvo en secreto por un tiempo a los altos cargos y al personal de la Administración de Joe Biden, presidente norteamericano.
Al secretario de Defensa se le practicó una prostatectomía (extirpación de la próstata), días después de ser ingresado en el Centro Médico Militar Nacional Walter Reed, el pasado 22 de diciembre. Posteriormente, el 1 de enero, fue hospitalizado nuevamente tras experimentar complicaciones asociadas a la intervención quirúrgica.
El ocultamiento de la hospitalización de una figura clave de la política militar estadounidense generó fuertes críticas contra el Departamento de Defensa en la opinión pública, así como entre funcionarios. Biden, dijo que Austin cometió un error de juicio al no informarle de su hospitalización, pero subrayó que sigue confiando en él para el cargo.