El juicio había sido pospuesto en febrero por la pandemia
Julian Assange rechazó este lunes, 7 de septiembre, una vez más su extradición a Estados Unidos (EEUU), luego de ser detenido por segunda vez al amparo de una nueva solicitud de entrega cursada por Washington a última hora, en la que amplía la base de sus acusaciones contra él.
Assange, presente en la sala 10 del tribunal penal londinense de Old Bailey, asintió para confirmar su identidad y que rehúsa ser extraditado a EEUU, donde afronta 18 cargos de espionaje y conspiración para la intrusión informática penados allí con hasta 175 años de cárcel.
En la primera vista de esta fase del juicio, la jueza Vanessa Baraitser rechazó la petición de la defensa, de «excluir» del proceso la nueva «conducta criminal» o actos delictivos adicionales atribuidos a Assange, por la justicia estadounidense, en el procesamiento emitido en junio y formalizado en agosto.
Este procedimiento, que sustenta la nueva petición de extradición, mantiene los 18 cargos imputados en abril de 2019, pero amplía el de intrusión, que contempla ahora no solo los tratos con el exsoldado estadounidense Chelsea Manning, en 2010, sino también con otras personas con las que Assange habría conspirado entre 2009 y 2015, para difundir secretos en su portal digital WikiLeaks.
La defensa, representada por Mark Summers, argumentó que, debido a la presentación tardía del proceso, no tenía tiempo material de lidiar con las nuevas alegaciones y descartaba pedir un aplazamiento para no alargar el proceso para su cliente, en tal sentido pidió su exclusión.
Se espera que la defensa llame la tarde de este lunes a declarar a su primer testigo, que tratará de demostrar que las imputaciones de EEUU., contra Assange tienen «motivaciones políticas» y su extradición constituiría un «abuso de proceso».
Por su parte, la fiscalía, representada por Joel Smith, considera que es un caso de «pura criminalidad».
Las revelaciones en WikiLeaks expusieron crímenes de guerra en Irak y Afganistán, archivos sobre las detenciones extrajudiciales en la prisión de Guantánamo y cables diplomáticos que desvelaron abusos de derechos humanos en todo el mundo.