Siete de cada 10 equipos en el país tienen gas freón, que debe ser reemplazado por sus efectos en el ambiente. Con producción nacional se podría satisfacer entre 40% y 50% de la demanda, calcula Alcides Cayama, presidente de Venacor
Si entras a una panadería en Caracas con Alcides Cayama, presidente de la Cámara Venezolana de las Industrias de la Ventilación, Aire Acondicionado y Refrigeración (Venacor), seguramente te dirá que busques un punto en el que no esté presente este sector. Y tiene razón. Las neveras de la casa o de los comercios, el aire acondicionado de un centro comercial son objetos que garantizan la preservación de un alimento, la salud de un enfermo, el bienestar de una familia y mucho más.
Como toda la economía venezolana, el sector ha estado en el congelador debido a la emergencia humanitaria. Y si faltaba más frío, se sumó la pandemia. La pequeña recuperación económica que experimenta el país desde mediados de 2021 les ha dado un respiro a los afiliados a Venacor, sin perder de vista los problemas pendientes.
Uno de los retos para el sector es la actualización tecnológica. «Una vez que nos actualicemos tecnológicamente tenemos que iniciar la sustitución de gases refrigerantes que le hacen daño a la capa de ozono, y esos equipos ponerlos a operar con otros refrigerantes», explica Cayama. Para llegar allí hay que formar al personal, y también, lograr alianzas entre el sector público y el privado y determinar, por ejemplo, qué se hará con los gases que se eliminen.
Para todo ese proceso «estamos retrasados», enfatiza. «Tenemos que empezar de inmediato. Y por eso Venacor, el Ministerio de Ecosocialismo y Fondoin estamos preparando el plan para lograr, en un tiempo determinado, que ese gas refrigerante freón 22 desaparezca totalmente de los equipos en Venezuela». Al menos siete de cada 10 equipos en Venezuela tienen freón 22. «En Venezuela hay mucho aires acondicionados con freón 22, hay muchas cavas con freón 22» y la gente no lo sabe.
Este es uno de los temas que se abordará en el cuarto congreso de Venacor, que se celebrará del 2 al 4 de junio en el Hotel Meliá Caracas.
Para Venacor es fundamental que se privilegie lo «hecho en Venezuela» y destaca que en el país se fabrican cavas, filtros especiales de aire para laboratorios farmacéuticos y terapias intensivas, aires acondicionados para quirófanos.»En este momento se produce 15% de lo que el país necesita», calcula. «Lo importado es más económico que lo producido nacionalmente» debido a varios factores.
«Necesitamos que el Estado se decida a comprar productos nacionales. En la medida en que un productor nacional logra vender más su fábrica crece, genera más empleo, la economía crece», destaca. «Es una cadena».
En Venezuela, según Cayama, hay entre ocho y diez fabricantes de equipos de aire acondicionado y entre 15 y 20 fabricantes de equipos de refrigeración. Podrían abastecer 40% o 50% de la demanda nacional con una medida como «compre venezolano».