Pese a los datos obtenidos, en el mismo período se observó que la tasa de salida, cierre o abandono de emprendimientos en el país marcó el 12% debido a la baja rentabilidad y a dificultades para acceder a opciones de financiamiento
El 91% de los emprendedores en Venezuela afirman que su principal motivación para iniciar un negocio independiente es «ganarse la vida», debido a la reducida oferta laboral, así como la insuficiente remuneración salarial proveniente de los empleos tradicionales, revelaron los resultados del Monitor Global de Emprendimiento 2022-2023.
El documento destaca que gran parte de los nuevos emprendedores cuenta con empleos tradicionales, a fin de contar con una fuente fija de ingresos.
«Los emprendedores venezolanos suelen tener mayor participación laboral. Son emprendedores multiempleo, no abandonan su trabajo asalariado mientras impulsan su negocio», aseguró el profesor del Instituto de Investigaciones Económicas y Sociales de la Universidad Católica Andrés Bello (UCAB).
De acuerdo con el estudio, cuyos resultados fueron presentados por representantes de la UCAB y del Instituto de Estudios Superiores de Administración (IESA) este 2 de abril, a pesar de que Venezuela presenta uno de los ecosistemas más débiles para emprender, contando con un ingreso per cápita menor a $20.000 y siendo superado únicamente por Irán, tiene uno de los «mejores espíritus» para iniciar nuevos emprendimientos.

Crece el sector
En este sentido, detallaron que entre los años 2022 y 2023 el número de emprendedores potenciales en el país latinoamericano se elevó en 4%.
De hecho, el más reciente informe reveló que 22,7% de los venezolanos entre las edades de 18 y 64 años se dice que están «arrancando un nuevo negocio».
Para este mismo período, el 96% de la población encuestada consideraba que contaba con los conocimientos, habilidades y actitud necesarias para emprender en Venezuela, mientras que solo el 32% se mostraba temeroso ante la posibilidad de fracaso, una característica determinante para todo aquel que considere integrarse al sector del emprendimiento.
Negocios nacientes, nuevos y establecidos
Es por este motivo que la Nación cuenta con un nivel elevado de Actividad Emprendedora Temprana (TEA por su nombre en inglés), ocupando el puesto 9 de 49 países que completaron el estudio en el año 2023, presentando un avance de 6 posiciones en comparación con 2022, cuando ocupó el lugar 15 del listado.
No obstante, la tendencia se reduce a medida en que se avanza en los procesos de transformación de la empresa.
En 2023, la tasa de negocios nacientes en Venezuela, considerados así a aquellos emprendimientos que aún no pagan sueldos y salarios, se ubicó en 16,55%; los nuevos negocios, que tienen una existencia por debajo de los 3 años y medio, pero que ya cuentan con una nómina de empleados, se estableció en 6,67%; mientras que los negocios establecidos o consolidados solo alcanzaron el 4,47%.

La tasa de salida, cierre o abandono de emprendimientos en el país marcó el 12%, según el último estudio realizado, debido a la baja rentabilidad de la compañía, la falta de políticas públicas, así como las dificultades para acceder a opciones de financiamiento.
Frente a este escenario, las autoridades y académicos presentes en el evento, sostuvieron que si bien es importante reconocer el espíritu emprendedor venezolano, garantizar la sostenibilidad de estas empresas nacientes en el tiempo aún representa «un reto conjunto».