Estas declaraciones están motivadas por el conflicto que sostiene ambas naciones por la imposición de aranceles a productos asiáticos por parte de la administración del presidente norteamericano, Donald Trump
«Nos oponemos completamente a este recurso sistemático, a las sanciones comerciales, a los aranceles y al proteccionismo. Esta instigación premeditada de un conflicto comercial constituye un terrorismo económico, y un acoso económico puro y duro», expresó el viceministro chino de Relaciones Exteriores chino, Zhang Hanhui.
Este conflicto comercial se intensificó a mediados de mayo, cuando Washington aumentó los aranceles a los productos chinos y prohibió a sus empresas tecnológicas trabajar con la compañía asiática Huawei.
El canciller comentó en rueda de prensa que Pekín se mostrará más ofensivo ante las presiones de Washington hacia la economía china. «Somos contrarios a la guerra comercial, pero no nos da miedo», precisó.
Por último, Zhang Hanhui advirtió que «Este conflicto comercial también tendrá un impacto negativo importante en el desarrollo y el reimpulso de la economía mundial”.