Ante la tormenta de críticas después de la goleada encajada en el debut de Ecuador ante el Uruguay de Luis Suárez y Edinson Cavani (4-0), el presidente de la Federación Ecuatoriana de Fútbol (FEF), Francisco Egas, dijo a periodistas que «sería irresponsable» poner en duda la continuidad del técnico en plena competición
Todo comenzó con ilusión, el colombiano regresaba a la selección de Ecuador con el feliz recuerdo del Mundial de Corea del Sur y Japón-2002. Su nuevo ciclo ni siquiera ha cumplido un año y la decepcionante Copa América de Brasil-2019 podría cerrarlo prematuramente.
‘Bolillo’ Gómez asumía la cita como la oportunidad de avanzar en la reconstrucción del equipo con vistas a la clasificatoria sudamericana de la Copa del Mundo de Catar-2022, pero haber sumado apenas un punto de nueve posibles hace que todo se tambalee.
«Si me echan, me tengo que ir; pero a mí no me pasa eso por la cabeza», comentó el entrenador colombiano el lunes en el estadio Mineirao de Belo Horizonte, después del empate 1-1 entre Ecuador y Japón que decretó la eliminación del seleccionado tricolor tras derrotas frente a Uruguay (4-0) y Chile (2-1).
Sin embargo, Gómez defendió el trabajo realizado desde su designación en agosto de 2018.
«Hace un año no había equipo, mí ningún directivo cuando me contrataron me dijo que seguir depende de como me iba en la Copa América. Si me dicen: ‘Si le va mal en la Copa América, lo echamos’, no vengo», agregó con disgusto.
Shoya Nakajima marcó en el minuto 15 del compromiso del lunes en el estadio Mineirao de Belo Horizonte y Ángel Mena igualó en el 35. Un empate que envió a los dos seleccionados de vuelta a casa. «Nos vamos tristes por la eliminación. Es bonito marcar gol, pero no sirvió de mucho», lamentó Mena.