El encuentro tuvo de todo. Un error clamoroso de Unai Simón, que pifió en una cesión de Pedri, remontada con autoridad de España, empate en el descuento de Croacia para ir a una prórroga abierta
Lluvia de goles en la Eurocopa con una España que se dejó empatar luego de una ventaja 3-1, pero que en la prórroga impuso su jerarquía y se llevó el encuentro por dos goles de diferencia.
Los españoles supieron sufrir hasta el final y terminaron resolviendo la partida ante una dura y respondona selección croata que demostró sus galones de subcampeona del mundo.
Como dato curioso, cabe destacar que solamente el primer partido de la Eurocopa inaugural, jugado por Francia y Yugoslavia en el Parque de los Príncipes el 6 de julio de 1960, acabó con más tantos, la victoria del cuadro balcánico por 4-5.
El encuentro tuvo de todo. Un error clamoroso de Unai Simón, que pifió en una cesión de Pedri, remontada con autoridad de España, empate en el descuento de Croacia para ir a una prórroga abierta en la que el equipo de Luis Enrique acabó imponiendo su mayor calidad.
España, que no pasaba de octavos de una fase final desde 2012, espera rival ahora para seguir soñando en San Petersburgo.
El equipo de Luis Enrique fue superior casi todo el partido. Y solo en los minutos posteriores al 1-0 y en el tramo final del tiempo reglamentario le entraron las dudas.
Con dos cambios en el once inicial, Gayá por Jordi Alba y Ferrán por Gerard Moreno, España salió monopolizando el balón frente a una Croacia muy defensiva que apenas salía de su área.
Koke, tras un gran pase de Pedri, erró un mano a mano con Livakovic. Y Morata cabeceó muy desviado un gran centro de Ferrán.
Croacia subió líneas en la segunda parte y lo pagó. Pedri se soltó. Ferrán y Sarabia empezaron a encarar en posición ventajosa. Así llegó el 1-2 de Azpilicueta, que inició la jugada con un gran arranque, pasó a Pedri, este a Ferrán, y su centro lo remachó a gol el jugador del Chelsea.
Los croatas empujaban pero sin mucha convicción. Ferrán pareció sentenciar el encuentro a 13 minutos del final.
El gol de Orsic estrechó el resultado y animó el partido, aunque España no pasaba apuros reales. Hasta que en el descuento apareció Pasalic, solo, para fusilar de cabeza a Unai Simón.
En la prórroga, Croacia se lo creyó. Unai sacó una gran mano a remate a bocajarro de Kramaric. Dani Olmo rozó el gol.
El jugador del Leipzig, con pasado en el fútbol croata, se desquitó con dos asistencias en cuatro minutos a Morata y Oyarzabal que sentenciaron el resultado. Budimir pudo meterle más emoción, pero su tiro salió rozando el palo.
Con información de EFE