Precisamente el silencio del templo parisino pareció servir como hipnótico paralizante a un Borussia Dortmund muy lejano de la versión ofrecida en la ida, una impotencia ofensiva reflejada en el discreto partido de su delantero
El París SG superó este miércoles, la maldición de los octavos de final que le perseguía desde hace años, al derrotar 2-0 al Borussia Dortmund (2-1 en la ida) en un Parque de los Príncipes, con gradas vacías como medida de prevención ante la epidemia del nuevo coronavirus.
Con Kylian Mbappé, en el banco de inicio, aquejado de un constipado, Neymar tomó la responsabilidad y anotó de cabeza el 1-0 (28), antes de que la conexión española entre Pablo Sarabia y Juan Bernat, finalizase con gol del lateral zurdo (45+1), permitiendo al cuadro parisino superar unos octavos en los que se había estrellado en las tres últimas ediciones de la Champions.
Si el campeón francés regresó entre los ocho mejores del continente europeo luego de haber caído ante el Barcelona, el Real Madrid y el Manchester United los últimos cursos, fue en gran parte sustentado en la figura de un Neymar, que se había perdido por lesión los enfrentamientos ante los ‘merengues’ y los ‘Diablos Rojos’.