La esencia y los valores del karate han formado a este atleta, que con talento y buenos resultados sigue escalando posiciones y manteniéndose entre los mejores en su especialidad
El sensei Miguel Galindo es uno de los máximos exponentes del kata en Venezuela, su larga trayectoria data de hace casi 25 años en donde se ha convertido en multicampeón de los Juegos Nacionales, Juegos Centro Orientales y todas las competencias que hacen parte del calendario del karate do en el país.
Actualmente ocupa el puesto número 2 del ranking nacional en la categoría de kata individual adulto, por detrás del sensei Antonio Díaz.
Cabe resaltar que ha participado en eventos internacionales destacándose con dos medallas de bronce obtenidas en el Open de París, quedando en su momento entre los 13 mejores del mundo en el ranking.
Galindo comenzó en el dojo del Círculo Militar, y en su infancia era un destacado del kumite, sin embargo, fue el kata con el que logró obtener los grandes resultados que le han hecho obtener el nombre que hoy en día posee. “En mis competencias iniciales me iba mejor en el combate, pero fue a partir de los 11 años cuando ese disfrute en los entrenamientos de kata comenzaron a dar sus resultados”, comentó el karateca venezolano a Contrapunto.
En su trayectoria internacional, Galindo no solo recuerda sus triunfos, de hecho su anécdota predilecta se da en el 2012 cuando su ídolo del karate, la japonesa Rika Usami se encontraba haciendo barra y gritando su nombre desde las tribunas, luego de que compartiera los entrenamientos junto a ella y el sensei Antonio Díaz ya que los tres formaban parte de la misma organización.
“En ese momento me tocaba enfrentar al representante de Francia, quien era subcampeón del mundo, estaba viendo las cosas difíciles, por lo que Antonio me motivó a que diera lo mejor de mi, y al salir vi a Rika Usami brindándome su apoyo. Ese hecho hizo que me agrandara y a pesar de no haber terminado ganador, el resultado fue 3-2 y estuve muy cerca de un competidor que en ese momento era top en el mundo”, comentó.
El legado de Miguel Galindo en el karate tiene su sello personal, en Tokio 2020 el sensei Antonio Diaz probablemente estará representando a Venezuela y posterior a esta magna cita, se habla de Galindo como el encargado de tomar ese testigo, algo que no ve con presión, porque espera seguir escribiendo una historia de triunfos y distinta como la de todo atleta.
“No nos podemos comparar porque no tenemos las mismas condiciones, ideales y formas, el es un ejemplo para todos nosotros, pero yo con mis altas y bajas pienso escribir mi propia historia dentro de lo que se encuentre a mi alcance y posibilidades”, aseveró.
Acerca del crecimiento del karate, asegura que el talento existe y crece a diario. Sin embargo, considera que le hace falta apoyo: “Vemos competidores en los campeonatos nacionales con mucho talento desde temprana edad, pero hace falta el apoyo, debemos preocuparnos porque nuestros atletas se preparen de buena manera en todos los sentidos, para que se conviertan en seres humanos integrales”.
Luego de su camino como atleta, Galindo se visualiza en un futuro como un dirigente, ya que desde su experiencia como deportista ha podido vivir los aciertos y desaciertos de la dirigencia: “Un buen dirigente debe preocuparse por la preparación de sus atletas no solamente como deportistas sino también en su vida personal y su entorno”, aseveró.
A su juicio, el fogueo y la experiencia en todos los campeonatos internacionales, son la clave para hacer crecer a los atletas.
Finalmente, instó a las nuevas generaciones del karate a prepararse: “Deben prepararse, si fracasan en prepararse, van a fracasar en lo que quieran lograr. Entrenen siempre con la mente enfocada en mejorar, y con la confianza plena en las personas que se encuentran trabajando para ayudarlos”.
