La avenida principal se llenó de varios miles de personas. A la 1:00 de la tarde llegó María Corina Machado
El sol que este sábado 3 de agosto caía sobre Las Mercedes, en Caracas, no preguntaba por color político o convicción ideológica. En la avenida principal de esta urbanización había opositores de siempre, opositores radicales, opositores moderados. Pero, también, chavistas que apoyaron a Hugo Chávez y no apoyan a Nicolás Maduro, chavistas que apoyan a Maduro pero piensan que el mandatario perdió las elecciones del 28 de julio, chavistas que querían ver y escuchar a quienes no piensan como ellos. Todos se unieron en el mismo lugar, con la misma bandera, para atender la convocatoria que hizo la dirigente opositora María Corina Machado después de las elecciones presidenciales del 28 de julio.
La represión policial, una ola que se ha llevado por delante a habitantes de zonas populares como respuesta a las protestas post electorales, ha hecho mella en ciudadanas y ciudadanos, hasta el punto de que las declaraciones a los medios de comunicación son en condición de anonimato. Extraoficialmente se confirmó la detención de seis estudiantes de la UCV: cinco de ellos ya fueron trasladados a la cárcel de Yare III y uno de ellos permanecía, hasta el mediodía, en la sede del Cicpc en Parque Carabobo. Se los imputa por la presunta comisión de delitos como terrorismo, rebelión e incitación, y no se les ha permitido la defensa privada.
Yonathan Carrillo, presidente adjunto de la FCU-UCV, explicó que han sido encarcelados más de 10 estudiantes universitarios en todo el país, que no han tenido derecho a la defensa.
Un dirigente político, que prefirió no identificarse, reflexionó que posiblemente ya comenzó una transición en Venezuela, pero falta tiempo para ver los resultados. Militantes de Copei-ODCA han sido hostigados solo por fotografiarse con el candidato Edmundo González Urrutia, confirmaron voceros de esta tolda política que aguardaban, expectantes, la vocería de este sábado.
Reinaldo Quijada, coordinador general de UPP89, aseguró que los resultados del ente comicial no son confiables y sostuvo que la versión de un supuesto hackeo de Macedonia solo era creíble en las primeras horas, pero no después. Recordó, además, que están las papeletas y las actas para cualquier proceso de verificación.
El pueblo de las zonas populares acudió al llamado a concentrarse en Las Mercedes, destacó el dirigente opositor César Pérez Vivas. «Hay una campaña, una razzia dirigida por Nicolás Maduro para aplastar esta protesta pacífica que el pueblo ha llevado para denunciar el golpe de Estado que Nicolás Maduro ha propiciado».
Pérez Vivas sostuvo que la gente acudió a Las Mercedes para expresar su repudio a lo que califica como un fraude contra la soberanía popular. «Maduro no puede seguir con su soberbia, con su lenguaje procaz y soberbio, ofendiendo y amenazando a la nación venezolana». La solución negociada, a su juicio, pasa por el apoyo internacional para la verificación.
Mientras el exgobernador de Táchira hablaba, un revuelo indicó que llegaba el famoso camioncito en el que se traslada Machado. Rumores y más rumores. ¿Venía o no venía? En principio, no estaba, pero posteriormente se subió al camión y acompañó, entre el fervor popular y las palabras para los asistentes, una cuadra de recorrido, hasta el punto -después de la plaza Alfredo Sadel- en que tomó la palabra. La escoltaban Delsa Solórzano, Roberto Enríquez, Williams Dávila y Juan Pablo Guanipa, entre otros dirigentes que han asumido acompañarla en sus recorridos.
«Corina» o «María Corina», como la identifican popularmente, habló de paz, encuentro y reconciliación. Instó a la población a mantenerse en las calles y claramente tendió la mano al chavismo, a los trabajadores públicos -que también estuvieron presentes- y a los funcionarios policiales.
Media hora después, cuando Machado se retiró de Las Mercedes, la gente comenzó a abandonar la avenida principal. Salieron como llegaron: a pie, con banderas, a la expectativa. Varias personas se fotografiaron con un grupo de sacerdotes capuchinos que se presentaron con su traje y con un llamado a la paz.
Un poco más adelante, sobre el puente que une El Rosal con Las Mercedes, uno de los asistentes comentó: «Ojalá la gente de la oposición llegue a un acuerdo con el gobierno». Las cartas, entre la gente, parece que están echadas.