Según la gubernamental Administración de Información de Energía (EIA), los inventarios de petróleo en Estados Unidos cayeron en unos 4,6 millones de barriles la semana pasada
El petróleo Brent (entrega febrero 2024) operó a 75,67 dólares el barril, subiendo unos +1,62 USD (+2,19%) frente a los 74,05 USD en el cierre del jueves, en Europa. Mientras que en la bolsa de Nueva York, el WTI se ubicó en 71,02 dólares el barril, subiendo unos +1,68 USD (+2,42%) frente a los 69,34 USD en el cierre del jueves.
el precio del petróleo subía recuperando terreno después de que Arabia Saudita y Rusia pidieron a más miembros de la OPEP+ que se unan a los recortes de producción. Pero se encaminaban a su séptima caída semanal consecutiva (-4%) (sus mayores pérdidas en 4 semanas) debido a la preocupación por el exceso de oferta mundial y la débil demanda china.
En la sesión anterior, ambos referenciales cayeron a su nivel más bajo desde finales de junio, señal de que muchos operadores creen que el mercado sufre un exceso de oferta.
El Brent y el WTI también se encuentran en contango, una estructura de mercado en la que los precios a mes inmediato cotizan con descuento respecto a los precios más lejanos.
Tamas Varga, de la correduría PVM, dijo: «El debilitamiento de la posición de apoyo de la OPEP+, unido a la producción récord de Estados Unidos y a la debilidad de las importaciones chinas de crudo, sólo puede significar una cosa: hay abundancia de petróleo disponible, lo que se refleja claramente en la estructura de contango de los dos principales contratos de referencia del crudo«.
Arabia Saudita y Rusia, los dos mayores exportadores de petróleo del mundo, pidieron el jueves a todos los miembros de la OPEP+ que se sumen a un acuerdo de recorte de la producción por el bien de la economía mundial, sólo unos días después de una díscola reunión del club de productores.
Alimentando la caída del mercado, los datos de las aduanas chinas mostraron que sus importaciones de crudo en noviembre 2023 cayeron un -9% respecto al año anterior, ya que los elevados niveles de inventarios, la debilidad de los indicadores económicos y la ralentización de los pedidos de las refinerías independientes debilitaron la demanda.
Según la gubernamental Administración de Información de Energía (EIA), los inventarios de petróleo en Estados Unidos cayeron en unos 4,6 millones de barriles la semana pasada.