«La papa salía de los campos a los almacenes de la agroindustria pero en la actualidad, la situación cambió», lamentó el presidente de la Federación
El presidente de la Federación Nacional de Productores de Papas y Hortalizas, Aldemaro Ortega, indicó que la reducción en la producción del tubérculo para el uso de la industria se debe a la imposibilidad de importar semillas en la variedad Atlantic.
«Anteriormente, el sector agroindustrial venezolano facilitaba a los agricultores la semilla Atlantic y, además, de abono y otros productos para el cultivo del tubérculo», precisó el vocero, situación que ha afectado especialmente a los agricultores de Aragua, Carabobo y Lara.
Sostuvo que la convivencia entre el productor y la industria, permitía definir el precio final de la papa, considerando que previamente contaban un mercado cautivo.
«La papa salía de los campos a los almacenes de la agroindustria pero, en la actualidad, la situación cambió», lamentó el presidente de la Federación.
Detalló que en Venezuela se produce la papa conocida como «María Bonita», que suele ser de muy buena calidad, pero advirtió que el sector requiere del financiamiento del estado venezolano: «El tubérculo criollo enfrenta un mercado inseguro, por la competencia desleal y el contrabando proveniente de Colombia».
Bajo esta línea de ideas, precisó que los consumidores prefieren comprar productos más económicos provenientes del exterior, antes que adquirir lo hecho en Venezuela.
El dirigente gremial se pronunció por una “alianza estratégica” entre el gobierno, agricultores y la agroindustria, con la finalidad de planificar la siembra de 300 hectáreas de papas para el uso industrial.
Costo de siembras
Para sembrar una hectárea de papas se necesitan invertir cerca de 10 mil dólares, sin incluir costos por mano de obra, transporte, ni combustible, entre otros gastos.
Detalló que un saco de 50 kilos de semilla cuesta 100 dólares y para el cultivo de una hectárea se requieren 50 sacos, además de 35 sacos de abono de fertilizantes MPK (Sulfato de potasio) y cada uno al precio de 60 dólares.
A la lista se suman los costos de los productos pre emergentes, entre ellos fungicidas, herbicidas, contratar a los regadores de las siembras y combustible.
El presidente de la Federación Nacional de Productores de Papas y Hortalizas dijo que en años previos dichos costos los aportaba la agroindustria e incluía abonos y fondos de avance.
«Es una cifra muy elevada que los productores no tienen en estos momentos y, además, representa un costo muy arriesgado para los agricultores venezolanos por la inseguridad del mercado, el contrabando y la competencia desleal», dijo.
Nota de prensa