La Asamblea General de la ONU condenó por 28º año consecutivo el embargo estadounidense impuesto a Cuba hace casi seis décadas.
Cuba volvió a conseguir este jueves 7 de noviembre, en la Organización de Naciones Unidas, el abrumador respaldo de 187 de los 192 países miembros en su petición para poner fin al embargo que le impone Estados Unidos, aunque en esta ocasión Brasil, con su voto en contra, y Colombia, con su abstención, castigaron a la isla.
La votación de la Resolución «Necesidad de acabar con el embargo económico, comercial y financiero impuesto por Estados Unidos de América a Cuba», que no es vinculante, ha sido propuesta anualmente por La Habana, desde 1992 con similares resultados.
Sin embargo, por primera vez, además de los habituales votos en contra de Estados Unidos e Israel, que se repiten año tras año, Brasil ha decidido subirse al barco estadounidense y Colombia ha optado por la abstención, al igual que Ucrania, que el año pasado prefirió no votar. Por su parte, Moldavia, al igual que en la anterior votación, no ejerció su derecho al sufragio.
La Asamblea General de la ONU condenó por 28º año consecutivo el embargo estadounidense impuesto a Cuba, hace casi seis décadas por «anacrónico» e «inhumano».
El gobierno estadounidense «no esconde su propósito de asfixiar económicamente a Cuba e incrementar los daños, carencias y sufrimientos a nuestro pueblo», afirmó en la Asamblea el Canciller cubano, Bruno Rodríguez, que denunció «una escalada en la agresión contra Cuba» de parte de Donald Trump.