Horacio Molina de la FCU-UCV, William Anseume de la Apusb y el diputado Luis Barragán consideran que la sentencia que pide elecciones vulnera la autonomía de las universidades
El dirigente Horacio Molina, secretario de Cultura adjunto de la Federación de Centros Universitarios de la Universidad Central de Venezuela (FCU-UCV) y coordinador universitario del partido Vente Venezuela, considera que la sentencia del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) es una «agenda que quiere imponer» el presidente de la República, Nicolás Maduro, dentro de las universidades autónomas.
«Sí, sí queremos elecciones y renovar nuestras autoridades universitarias pero con las reglas del árbitro electoral de la universidad, no con la agenda y el mecanismo que quiere imponer el régimen».
La sentencia de la Sala Electoral del TSJ convoca a comicios para elegir a las autoridades universitarias en un período de seis meses.
Molina asegura que las universidades autónomas se encuentran «intervenidas desde hace mucho», por lo que las describe como un «bastión en resistencia», por lo que afirma que las autoridades «continuarán en sus cargos hasta que se cumpla el debido proceso».
William Anseume, de la Asociación de Profesores de la Universidad Simón Bolívar, catalogó la medida como una pretensión de «imponer miedo en la universidad venezolana».
«El régimen ataca permanentemente a la universidad venezolana. Lo vimos con el secuestro del rectorado de la Universidad De Oriente (UDO), con lo sucedido en la Francisco de Miranda en Coro» , dijo Anseume.
El también integrante del partido Vente Venezuela insistió en que apoya una renovación de las autoridades universitarias, pero «desde la autonomía universitaria».
Y prosiguió: «Procuremos elecciones reales, pero como un acto de rebeldía que promueva el fin del régimen. La UCV no se arrodilla frente a la tiranía».
El diputado de la Asamblea Nacional (AN), por el partido Vente, Luis Barragán, pidió defender la autonomía universitaria ante la decisión del TSJ la cual catalogó de ilegal.
«Hemos cuestionado y seguiremos cuestionando la decisión del TSJ ilegal. Este hecho lesiona y cuestiona la autonomía universitaria. Defender la universidad venezolana es defender la República y no vamos a salvar a la universidad si no salvamos el país», sentenció Barragán.