La tecnología avanza, y también lo hace para alcanzar un ideal determinado de belleza. La cirugía plástica será cada vez menos invasiva, asegura el doctor José Rosales
Unas tetas grandes. Una nariz más perfilada. La mayor parte de la población en Venezuela sobrevive a la emergencia humanitaria compleja, pero una parte sigue buscando la cirugía plástica para hacer real su ideal de belleza.
¿Qué buscan ellas? Al cirujano plástico José Rosales la experiencia le indica que las mujeres quieren definición del abdomen, una cintura más estrecha, mamas más grandes. ¿Qué buscan ellos? El marcaje abdominal, los «cuadritos» o el llamado «six pack».
En Venezuela la cirugía más demandada por las mujeres es la de mamas, especialmente en mujeres de 18 a 40 años de edad, explica. Le siguen la liposucción, la colocación de grasa en las nalgas (lipotransferencia glútea), reconstrucción de la nariz (rinoplastia). La colocación de implantes mamarios puede ser pedida de regalo a los padres, o ser solicitada por las parejas de las mujeres.
La más demandada por los venezolanos es la rinoplastia. También, la liposucción, la intervención de las orejas (otoplastia), detalla Rosales. Generalmente estas intervenciones son solicitadas por hombres de 18 a 35 años. Las esposas o novias piden para ellos la definición abdominal.
Todo está disponible en Venezuela, precisa Rosales en entrevista con contrapunto.com a su llegada de una actividad de formación en Turquía (curso sobre rinoplastia).
La tecnología (vaser, microaire, renuvion/jplasma) permite en la actualidad utilizar la liposucción para extraer grandes volúmenes de grasa y conseguir una mayor definición, y complementar con tratamiento para la flacidez. «Lo idea es combinar las tres tecnologías, porque se logra mayor definición y se consiguen los six pack o cuadritos». Es útil para cintura, brazos, pantorrilla, espalda, abdomen, papada, pectorales. Menos sangrado y recuperación más rápida son algunos de los beneficios.
El cirujano plástico puntualiza que es para «grasa localizada y sobrepeso, pero no obesidad». Aunque la mayoría de las que optan por este procedimiento son mujeres (80%), los hombres cada día lo buscan más.
Con los implantes mamarios ya no basta aumentar el tamaño. Las técnicas han cambiado para tener cicatrices mínimas, implantes más compatibles con el organismo y también más duraderos. Incluso, aclara Rosales, las casas comerciales sugieren reemplazarlas a los 25 o 30 años.
No basta con desear unos senos protuberantes. La elección del tamaño dependerá de la estatura, de la forma. Hay que lograr el equilibrio entre el cuerpo y el deseo. El médico comenta que también atienden a la población trans, que solicita implantes mamarios y armonización facial.
Una nariz diferente (rinoplastia) avanza hoy con técnicas menos invasivas, menos inflamación y menos hematomas y la garantía de resultados definitivos a largo plazo. «Generalmente las rinoplastias sufren modificaciones, puede ser que el cartílago tenga una deformación, porque adopta su posición natural de nuevo, o el hueso se consolida de forma no adecuada». Ellas y ellos la demandan casi a partes iguales (60% y 40%, respectivamente).
La atención de los daños causados por biopolímeros le corresponde al cirujano plástico, recomienda Rosales, para hacer la evaluación física y determinar la condición y el grado de complicaciones (son cinco). «A partir del grado 3 se convierte en quirúrgico. De resto, tratamiento médico con esteroides y evaluación».
¿Hacia dónde va la cirugía plástica? De entrada, Rosales asegura que cada día «será menos invasiva. El propósito es llegar a no hacer cicatrices, tratamientos estéticos que se complementan y evitan cirugías grandes».