Hasta ahora el discurso había sido de unidad y estaba enfocado en las coincidencias, pero llegó la hora de diferenciarse
El balón rueda en la cancha de la primaria. Empieza el juego serio con el inicio formal de la campaña electoral para los comicios que deberán definir el candidato de la Plataforma Unitaria y sus aliados para enfrentar al oficialismo, también a los que surjan de otros factores de la oposición.
Hasta ahora, más allá de algunas alusiones veladas y tímidas entre algunos candidatos, el discurso había sido de unidad y se enfocaba en las coincidencias.
Los movimientos estratégicos se comenzaron a dar.
Ajedrez: te mueves allá y yo acá
Manuel Rosales y un Nuevo Tiempo, quienes decidieron no postular candidato a las primarias, mostraron su apoyo a Henrique Capriles, armando un polo con dos de los partidos más fuertes de lo que queda del llamado G4.
Por otro lado, Henri Falcón mete a su organización Futuro en el canal por donde transita Carlos Prosperi con los adecos de Henry Ramos Allup, para comenzar a integrar otra coalición que pelearán por los votos de quienes participen en el evento del 22 de octubre.
Fuerza Vecinal, sin candidato propio, busca qué hacer con su potencial electoral que en 2021 concentró un poco más 400.000 votos. A esta organización se le observa deshojando la margarita, encontrándose muy cerca de Carlos Prosperi y la AD en resistencia.
Los candidatos se mueven en el tablero en función de acortar la distancia que le lleva María Corina Machado. La candidata de Vente Venezuela contesta tranquila, con aires de quien va ganando: “No es una amenaza. La alianza es perfectamente válida. Tienen todo el derecho”.
La jugada Capriles-Rosales
Capriles buscó a Rosales en el estado con la más alta densidad electoral del país, que además concentra la mayor cantidad de centros de votación asignados para la primaria.
En el Zulia habrá 341 centros de votación, que se traducen en el 11% del total nacional y 664 mesas de votación que significan el 12% de todas las asignadas a la primaria. No hay un estado con mayor concentración de infraestructura para votar en este evento que el Zulia.
Por otra parte, cuenta con la maquinaria de Un Nuevo Tiempo, con la que se logró aglutinar en 2021 alrededor de 600.000 votos en las regionales. Manuel Rosales obtuvo como candidato de la Plataforma Unitaria en el Zulia un poco más de medio millón de votos.
Además Zulia es el estado en donde se espera un mayor control de los centros de votación, debido a la protección que le pueden brindar la Gobernación del estado, en manos de Un Nuevo Tiempo, y la Alcaldía de Maracaibo, que es administrada por Rafael Ramírez, un militante de Primero Justicia.
¿Un gran elector?
La jugada Capriles-Rosales se ha visto como un movimiento que apunta a la posibilidad de que, luego de una primaria con un inhabilitado electo, alguien “de afuera” venga a encarnar los deseos opositores con posibilidad de ganar. Se habla de “un gran elector” que tenga un peso tal para incidir en la decisión post primaria con un inhabilitado electo.
La distancia entre el ganador y los demás participantes será una variable poderosa a la hora de tomar decisiones sobre la candidatura, en cualquiera de los escenarios. Los movimientos de Capriles y Prosperi van en esa dirección, es decir, a preservar el peso de su incidencia en el tablero político.
En este escenario, el discurso comienza a hacerse áspero. El candidato César Pérez Vivas se ha quejado de que, luego de aceptar la participación de los inhabilitados, “ahora pareciera que los quieren dejar de lado”.
“Si un inhabilitado es electo, tiene el derecho de salir a defenderse y a establecer su estrategia política, de movilización y diplomática, para hacer valer la voluntad de quienes lo eligieron”, dijo Pérez Vivas.
Por su lado, los adecos en resistencia sostienen que -a todo evento- el candidato de la Plataforma Unitaria debe salir de los 13 nombres que están compitiendo en la primaria.
La hora de los ataques entre los participantes en la primaria marca una cuenta regresiva y las heridas aparecerán, lo que puede atentar contra la participación si los ataques se vuelven virulentos y descalificadores.
Los partidos grandes moverán a sus cuadros, sus estructuras y buscarán arrollar a las organizaciones con menos tradición.
Al interior de la Plataforma Unitaria gravita la pregunta: “¿Vamos a hacer unas elecciones para que las gane alguien ajeno a esta coalición?”
La carrera acaba de comenzar con María Corina Machado adelante. Habrá que ver si la organización emergente de Vente Venezuela, y su voluntariado, es capaz de superar a la maquinaria adeca, apoyada por la estructura de Henri Falcón y los demás que se sumen. Y por otro lado, también debe superar a la coalición creada por Un Nuevo Tiempo y Primero Justicia, partidos con experiencia en la participación electoral.
¿Qué harán los demás candidatos?
No tenemos bolas de cristal para ver el futuro. Andamos con pies planos, pisando tierra y mirando la realidad política, económica y social del país.
El juego sigue.
