En medio del acto el parlamentario recordó que: «la palabra pontificia deben tenerla los venezolanos, no sólo asociada a lo que significa el Santo Padre, sino pontificio es aquel que construye puentes y la Iglesia tiene que construir puentes entre quienes pensamos distinto. Quienes pensamos distinto creemos que todo puede ser posible dentro de la tolerancia y entender que nadie tiene la razón sobre nadie, que sólo el diálogo, el entendimiento y la conversación nos podrá hacer unidos»
El diputado de la Asamblea Nacional (AN), José Gregorio Correa, participó en la toma de posesión canónica del cuarto Arzobispo de Barquisimeto, Monseñor Polito Rodríguez, en el estado Lara. En el evento recordó que: «La Iglesia tiene que construir puentes entre quienes pensamos distinto»
Correa aseguró que «hoy se nos presenta una oportunidad cuando asume el arzobispado de Barquisimento, Monseñor Polito Rodríguez, quien viene de ser obispo por ocho años de San Carlos, en Cojedes, donde la patrona coincide de la Divina Pastora».
Reiteró que: «La Divina Pastora tiene una significación para los venezolanos. Es la mayor peregrinación, confianza, fe que existe en toda Venezuela y es la segunda más grande de toda América, después de la Virgen de Guadalupe. Pero debemos tomar en cuenta que México, por su cantidad de habitantes, es que también logra esa fe en la Virgen de Guadalupe. Pero hoy los venezolanos necesitamos unión, un pontificio, una construcción de puentes».
En ese sentido, precisó que «la palabra pontificia hay que tenerla los venezolanos, no sólo asociada a lo que significa el Santo Padre, sino pontificio es aquel que construye puentes y la Iglesia tiene que construir puentes entre quienes pensamos distinto. Quienes pensamos distinto creemos que todo puede ser posible dentro de la tolerancia y entender que nadie tiene la razón sobre nadie, que sólo el diálogo, el entendimiento y la conversación nos podrá hacer unidos».
Enfatizó que «los venezolanos no tenemos motivos para estar divididos, para estar enfrentados. No tenemos guerras étnicas, no tenemos guerras religiosas, no tenemos guerras culturales, no tenemos guerras territoriales, tenemos formas de pensar distinto y eso nunca nos puede llevar ni a la violencia, ni a la guerra, ni a la ofensa».
Asimismo, el parlamentario señaló que «pensar distinto no es un delito y si además los que pensamos distinto y que creemos en un país distinto, pero con formas y maneras de llegarle de manera distinta, no podemos estar enfrentados. Cuando los venezolanos nos enfrentamos entre sí, le hacemos daño a los venezolanos. El daño no es al Gobierno, el daño no es a la oposición, el daño es a todos en la sociedad, los que piensan de una manera y los que piensan de otra».