Cuando el dirigente chavista Darío Vivas anunció -el pasado sábado 11 de enero- que este martes 14 de enero el oficialismo rodearía el Palacio Federal Legislativo, solo puso en evidencia que este recinto se convirtió en otro espacio para la expresión de la pugna por el poder en Venezuela.
Tradicionalmente los días martes la Asamblea Nacional (AN) sesiona en el Palacio. Esta vez, la directiva parlamentaria encabezada por Juan Guaidó cambió la convocatoria para el miércoles 15 de enero, con dos puntos de debate. Se supone que la directiva juramentada con los votos del PSUV, liderada por Luis Parra, sesionará este martes. O, en su defecto, lo hará la asamblea constituyente, para que el mandatario Nicolás Maduro presente su informe a la nación correspondiente a la gestión de 2019.
La directiva de Guaidó debió juramentarse en la sede del diario El Nacional, el pasado 5 de enero, en vista de que la directiva de Parra tomó las instalaciones del Palacio. Pero Guaidó y la mayoría de los diputados sesionaron en la sede legislativa dos días después, luego de forzar a los militares de la custodia a permitirles el paso.
A la convivencia forzada entre la AN y la constituyente se suma, ahora, otra directiva del Poder Legislativo (la de Parra), no reconocida por Estados Unidos ni por la Unión Europea. Parra y sus compañeros fueron sancionados por la Administración Trump.
Guaidó, por su parte, ya notificó a la Fuerza Armada para que garantice la seguridad de los parlamentarios y de los maestros que acudirán el miércoles 15 de enero al mismo Palacio Federal Legislativo.