Ya suman 48 horas de protesta debido al hacinamiento y a los retardos procesales
Al menos 80 -de 120- detenidos que permanecen en los calabozos de la Policía Municipal de Plaza (Guarenas- estado Miranda) iniciaron una huelga de hambre que incluye autolesiones.
Muchos cosieron sus bocas, y mediante pancartas, exigieron el traslado a centros penitenciarios.
Fuentes de la región informaron que la medida se inició el lunes 21 de junio. «Los detenidos se quejaban por la cantidad personas que duermen hasta en los pasillos que conducen a los calabozos».
Se conoció que en esa dependencia policial solo hay capacidad para 50 detenidos y el hacinamiento supera 240% , según indicó la ONG Una Ventana a la Libertad, a cargo del abogado especialista en derechos humanos Carlos Nieto Palma.
El jurista ha reiterado en diversas ocasiones que el tiempo de reclusión en los calabozos policiales – conocidos también como centros de detención preventiva-, no debe ser de más de 72 horas, y en PoliPlaza no se generan traslados desde el 2018.
La fuente reveló que las mujeres, enfermos, policías y detenidos por delitos contemplados en la Ley contra el Odio y la Ley contra la Corrupción y la Ley contra el Financiamiento al Terrorismo no se sumaron a la huelga.
Familiares de los detenidos se unieron a la protesta en las afueras de la comandancia policial e indicaron que en los calabozos hay más de veinte personas que ya recibieron sentencia y otros suman más de siete años recluidos sin obtener respuestas.