Los dirigentes opositores aseguran que tienen los números necesarios para colocar de renovar en la presidencia del Parlamento a quien ha sido reconocido por más de 50 países como mandatario interino. Otros lo ponen en duda
Alrededor de la sesión de este 5 de enero existe mucha incertidumbre porque existe un gran forcejeo sobre la reelección de Juan Guaidó como presidente del Poder Legislativo.
Para que esto suceda el parlamentario de Voluntad Popular debe conseguir 84 votos de la plenaria y por ello han desplegado toda una operación política para garantizar que esto suceda.
Las dirigencia opositora ha contactado a todos y cada uno de los diputados principales y suplentes que gravitan en la oposición para tratar de comprometerlos a votar por Guaidó.
Hasta ayer en la noche se llevaban a cabo reuniones para «amrrar» los respaldos necesarios ya que los opositores han advertido una estrategia del Gobierno de presionar para que esto no se produzca y denuncia «la compra de conciencias» de algunos parlamentarios que serín suceptibles a ceder a las presiones.
La propia Casa Blanca acusó al Gobierno de Maduro de ofrecer 500.000 dólares a los diputados del G4 para que no avalen la decisión de reelegir a Guaidó en el parlamento.
Los números
En la segunda semana de diciembre fuentes vinculadas con el parlamento indicaban que las cuentas opositoras daban por sentado que tendrían 101 votos presentes para renovar el «mandato» de Guaidó en la AN.
Tras las reuniones de los últimos días estos números han cambiado y ahora las proyecciones más optimistas colocan el número de votos a favor de Guaidó y de su fórmula en 94, con lo cual bastaría para ratificarlo, sin embargo, serían menos votos con los fue electo el año pasado en esta misma fecha.
Sin embargo existe un escenario de decisión «más apretada» en donde la votación a favor del actual Presidente de la AN es de 89 diputados. Esto obliga a afinar mucho más la estrategia opositora porque se notan las señales de desgaste del liderazgo y además la gobernabilidad del parlamento se complicaría.
La tarea que se han impuesto los dirigentes del G4 es ganar la presidencia de la AN con los votos presentes. De no lograrlo tratarían de habilitar la votación en remoto, lo que provocaría una reacción adversa del chavismo y seguramente se retirarían y tomarían la decisión de construir una directa paralela en la Asamblea Nacional.
Acudir al voto electrónico colocaría en aprietos a la oposición porque se debilitaría su ascendencia sobre la nación y le crearía «dudas razonables» a quienes respaldan a Guaidó.
Estos son los nombres que se han mencionado para integrar la Junta Directiva de la AN:
Presidencia del Parlamento: Juan Guaidó (VP).
Primera vicepresidencia: Juan Pablo Guanipa (PJ), O Ángel Medina (PJ)
Segunda vicepresidencia: Carlos Eduardo Berrizbeitia (Partidos minoritarios)
Secretario: Angelo Palmieri (UNT)
Jefatura de fracción: Carlos Prosperi (AD)