La Cancellería venezolana alertó al mundo sobre la transparencia en el uso y destino de los recursos anunciados, que corresponden en su «inmensa mayoría con préstamos bancarios, por lo que más que una conferencia de donantes (…)se puede calificar como un club de prestamistas y estafadores»
El Gobierno de Nicolás Maduro deploró este miércoles 27 de mayo, que un grupo de gobiernos autodenominados donantes, liderados por la Unión Europea (UE), organice «espectáculos fraudulentos» para la supuesta atención de la población de migrantes venezolanos en el exterior.
En un comunicado de la Cancillería señaló que a través de la Conferencia Internacional de Donantes «pretenden engañar a la comunidad internacional para legitimar sus continuadas acciones intervencionistas, mediante falsas y precarias promesas de fondos, supuestamente dirigidos a atender la migración venezolana».
Aseveró que este evento «mediático ideologizado» para atacar al Gobierno de la República Bolivariana de Venezuela, y de esta manera, ocultar las más recientes agresiones económicas y presuntas operaciones mercenarias contra el pueblo venezolano.
Además, calificó como «cínica» la supuesta preocupación europea por la situación de COVID-19 en Venezuela, cuando los llamados países receptores y la mayoría de los autodenominados donantes son los principales focos del coronavirus en la región y en el mundo entero. «Precisamente esos gobiernos son los que ameritan recursos y donaciones para enfrentar el colapso de sus sistemas de salud, proteger la vida de sus ciudadanos y recuperar sus economías ante la pandemida», acotó.
También alertó al mundo sobre la transparencia en el uso y destino de los recursos anunciados, que corresponden en su «inmensa mayoría con préstamos bancarios, por lo que más que una conferencia de donantes, el referido evento se puede calificar como un club de prestamistas y estafadores, cuyos gobiernos y bancos han congelado más de 10 mil millones de dólares del pueblo venezolano en los últimos años».
Finalmente, se comprometen a ratificar que sus instituciones seguirán atendiendo a las decenas de miles de migrantes venezolanos que hoy vuelven a Venezuela por la xenofobia, la persecución y la expansión descontrolada de COVID-19.