El secretario general del partido Unidad Visión Venezuela estima que, en presuntos hechos de corrupción en el sector eléctrico, se habrían malversado más de 100 mil millones de dólares
Los apagones que azotaron el país en el mes de marzo no son consecuencia de un ataque electromagnético o de un disparo de fusil, sino de la desinversión en el sector y de la corrupción, aseguró este viernes el diputado Omar Ávila, secretario general de Unidad Visión Venezuela.
El economista sostuvo que no hay una sola imagen que demuestre la tesis de que el segundo apagón de marzo (que comenzó el lunes 25 de marzo) se debió a un incendio o al disparo de un francotirador.
Ávila subrayó que, en el mes de marzo, han sido más los días sin trabajo y clases que los días con actividades, con las consecuencias previsibles para una economía ya golpeada por la recesión.
Consideró una contradicción que, mientras la mayor parte del país se hallaba a oscuras el miércoles 27 de marzo, el dirigente oficialista Diosdado Cabello transmitiera su programa «Con el mazo dando» con luz abundante.