Sensibilización y conciencia, factores clave para detener la violencia contra la mujer

Zurima Vásquez @zdvasquez | Video: David Garrido

Existen muchas formas de violencia hacia la mujer, pero en pandemia se han visto incrementados los casos de violencia psicológica, física y sexual

A propósito del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, Sergio Correia Fernandes, abogado y exfiscal nacional en materia de violencia contra la mujer, destacó que la sociedad tiene una deuda en este ámbito, «la violencia contra la mujer es un problema de salud pública», subrayó.

La violencia se debe a contextos de subordinación, dominio o jerarquía del hombre (agresor) sobre la mujer, y la ven como un objeto, apuntó Correia.

En este sentido, la ONG Centro de Justicia y Paz señala que dentro de una relación, la mujer representa un rol pasivo, sumiso y complaciente, lo que lleva a las imposiciones de su compañero.

Precisó Correia que la Ley Orgánica sobre el Derecho de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia tiene como objeto prevenir, sancionar y erradicar todas las acciones de violencia, protegiendo la integridad sexual, familiar, psicológica y laboral de las afectadas, para que este flagelo no siga sucediendo.

A su juicio, falta sensibilizar, concienciar y capacitar al personal (funcionarios) que recibe las denuncias.

Destacó que se ha incrementado la violencia en tiempos de pandemia y eso se debe a que hay una relación de poder del hombre al ver a la mujer como un objeto. «El encierro ha hecho difícil la convivencia y los agresores han arremetido contra las mujeres por creer que ellas son un objeto», subrayó.

Por su parte, Eliana Cherubini, abogada con experiencia en administración de justicia y derechos humanos, destacó, en entrevista para Contrapunto, que se han logrado muchos avances a nivel normativo respecto a la violencia contra la mujer. «Tenemos tribunales y las fiscalías especializadas en esta materia, y se incorporó el delito de femicidio».

Subrayó que la prevención del delito siempre va a ser una deuda pendiente de la sociedad, «mientras no logremos sensibilizar a las personas y cambiar los patrones culturales, la violencia va a continuar ocurriendo», destacó.

«La tarea de prevención viene desde el hogar, la infancia es al etapa crucial, el hogar deber ser un lugar seguro y no de riesgo para la mujer», agregó.

Cherubini apuntó que los casos de femicidios, por lo general, están precedidos por diversos tipos de maltrato (psicológico, amenazas, hostigamiento y violencia física).

La abogada señaló que «la respuesta (a este flagelo) no solo es legislativa, hay que avanzar en la capacitación permanente de los funcionarios, y atender otros problemas asociados a la violencia, como la trata de personas, embarazo en adolescentes y el funcionamiento de las casas de abrigo«.

Dijo además que no existen cifras oficiales de femicidios. Y en este sentido, la ONG Utopix destacó que durante el pasado mes de octubre ocurrieron en Venezuela 22 femicidios, para alcanzar un total de 217 casos en lo que va de año.

Asimismo, en lo que va de 2020, la Cepaz ha atendido 196 casos de violencia de género en Venezuela; 190 de marzo a noviembre.

Según reseña la ONG Transparencia Venezuela, la trata de personas con fines de explotación sexual afecta a 4,8 millones de personas globalmente, 72% de las víctimas son de sexo femenino, discriminándose esta cifra en 49% mujeres y 23% niñas.

De acuerdo con la Comisión para los Derechos Humanos y la Ciudadanía (Codehciu) Caroní es el municipio del estado Bolívar con más casos de violencia basada en género, con 28. Le siguen: Angostura del Orinoco, con 6; El Callao, con 3; por último Piar, Roscio y Cedeño con 1 registro cada uno.

Juntos suman un total de 40 registros en el estado Bolívar, entre enero y marzo. Cifras que dibujan un panorama de alerta: son 5 casos más que en el primer trimestre del año 2019.

La situación para las mujeres en el estado Bolívar es aún más preocupante. De acuerdo con la Organización de Mujeres Amazónicas Wanaaleru, en el informe Mujeres al Límite 2019, la violencia hacia las mujeres por motivos asociados a la actividad minera se centra en la construcción de poblados donde se instalan bares, casas de prostitución y ventas de comida controladas y administradas por los mismos trabajadores de la minería, quienes terminan haciendo negocios con fines de explotación sexual que derivan a su vez en altos índices de feminicidios y violencia territorial.

Por otra parte, las estimaciones mundiales publicadas por la Organización Mundial de la Salud (OMS) indican que alrededor de una de cada tres (35%) mujeres en el mundo han sufrido violencia física y/o sexual de pareja o violencia sexual por terceros en algún momento de su vida.

Quienes son víctimas de violencia de género pueden acudir a los órganos competentes (policías, Ministerio Público) para presentar su denuncia, además del apoyo que prestan algunas organizaciones no gubernamentales.