El «Plan Zamora» nace por decreto presidencial en el 2017 y su ejecución estuvo a cargo del Ministerio de la defensa
El defensor de los Derechos Humanos, Rafael Narváez, se pronunció ante el informe de la fiscal de la CPI saliente, Fatou Bensounda, donde asegura la inacción del Estado en castigar a los responsables de cometer crímenes de lesa humanidad.
«Sin duda es un gran paso significativo en esa búsqueda de la justicia internacional para reparar el daño irreparable de las víctimas de violación grave de los DDHH por parte del Estado a través del Plan Zamora», señaló el también abogado.

Manifestó que «el Estado se sigue equivocando con la CPI, olvidando que allí no se acepta arrepentimientos ni colaboración, no existe privilegios ni vale inmunidad de jefes de Estados en ejercicio y tampoco para militares de alto rango», agregó Narváez.
El coordinador por los derechos civiles afirmó que este es el resultado de la valentía de familiares, víctimas «y de quienes hemos sostenido que la única esperanza que nos queda es la CPI porque en nuestro país el Estado despreció las denuncias y la exigencia de las víctimas de lograr justicia, nunca olvidamos de los aplausos, algarabía, carcajadas y premios otorgados a los componentes del Plan Zamora después de las jornadas de represión, detenciones arbitrarias, torturas, tratos crueles e inhumanos y degradantes, desaparición forzadas de personas, heridos y muertes contra los manifestantes», dijo.
El conocido abogado penalista cuestionó a quienes pretenden ir a un diálogo para cuotas de poder político «con un Estado sentado en el banquillo por la CPI por Crímenes de Lesa Humanidad». Además, el exparlamentario insistió en seguir apoyando a las víctimas.