Según investigaciones del OVP del primer trimestre de este año, 60% de la población reclusa estaba muriendo por tuberculosis.
La directora del Observatorio Venezolano de Prisiones (OVP), Beatriz Carolina Girón, afirmó este jueves 26 de diciembre que, el 2019 fue un año de enfermedades y desnutrición en las cárceles venezolanas.
Las condiciones de los centros penitenciarios son precarias, entre sobrepoblación y retraso en los procesos legales, ya es común las enfermedades, indicó Girón que gran parte de la población que se encuentra recluida fallece a causa de la tuberculosis, «el custodio se infecta, el policía que está cuidando también, esto es altamente contagioso, es una cadena”, dijo.
Según Girón, los presos sólo deben ser detenidos por 72 horas en los calabozos policiales y luego deben ser llevados a juicio donde un juez determina la sede en la que se cumplirá la condena, sin embargo, denunció que los familiares de los acusados deben comprar el «kit», que cuesta por lo mínimo 1.500.000 bolívares, para que el recluso pase a un centro penitenciario”.
«Tenemos dos ministerios, uno que está cuidando preso y el otro que no da los cupos para que estos presos penados cumplan», fue uno de los testimonios de los familiares de los penados.
Destacó Girón que «los problemas de sobrepoblación son comunes en cárceles policiales un ejemplo claro es la Zona 7 en Boleíta, donde la capacidad es para 200 personas y existe una población de alrededor de 1000 reclusos, creando muy malas condiciones de salubridad y calidad de vida».