Muchos tapabocas y gente en la calle como si fuera un domingo.
La mañana comenzó lenta y poco a poco se activó hacia el mediodía.
Los negocios estaban cerrados con la excepción de aquellos que vendían comida para llevar o alimentos. En algunos supermercados se formaron colas para comprar.
El estado de cuarentena fue atendido por buena parte de la población que se quedó en su casa, dejando a un mínimo de gente en las calles de Caracas.














