El Cardenal Baltazar Porras afirmó que los restos encontrados serán preservados en una caja de madera y en una fosa de cemento
“Esto para mi es todo, salvó a mi hijo, le debo mucho a José Gregorio”, contó Andrea Magallanes con su hijo Alexander en los brazos, afuera de la Iglesia Nuestra Señora de La Candelaria.
De igual manera, afirmó que luego de que su hijo estuviera con un paro cardíaco a causa de una complicación asociada al cáncer de medula, “José Gregorio lo dejó por una misión».
Este lunes, los feligreses como Andrea fueron al proceso de exhumación del nuevo beato, unos a cumplir promesas, otros a orar ante El Siervo de Dios.
Con carteles, fotografías, dibujos y estatuillas, los caraqueños fueron a presenciar a la distancia, el ultimo paso para que el medico de los pobres sea beatificado.
“Ha hecho muchos milagros, no se qué tanto esperaba el vaticano para que sea un Beato, ya es un santo para los venezolanos”, aseguró Ernesto Pérez.
Dentro de la iglesia, los representantes del catolicismo en el país realizaban el proceso que consta de la exhumación de huesos del cuerpo del futuro beato, un fragmento de su ropa o un objeto que haya usado en el transcurso de su vida y cualquier objeto que haya sido tocado por una reliquia de primer grado.
El Cardenal Baltazar Porras presidió la ceremonia religiosa que se celebró el mismo día del 156 natalicio del célebre trujillano. Los caraqueños, por su parte, cantaban desde el feliz cumpleaños al Doctor, el himno nacional, canciones de índole católica y el Alma llanera.
«Señores, procedan a la exhumación de los restos mortales del venerable siervo de Dios, doctor José Gregorio Hernández Cisneros», dijo el cardenal Porras como inicio del protocolo.
Afuera se oían los cantos y campanas que salían desde la iglesia, los creyentes se aceraban a rezar de rodillas ante el venerable, con lagrimas, en silencio y devoción.
“Desde siempre él es mi santo soy zuliana y debe ser por la cercanía con Trujillo que siempre lo quise, a él le debo todo”, expresó Esilda Ávila a la prensa.
El cardenal Baltazar Porras informó que el equipo médico necesita, por lo menos, dos días para practicar los exámenes, extraer las reliquias y preparar los restos.
Por otro lado, indico que los restos encontrados serán preservados en una caja de madera y en una fosa de cemento y que será este sábado cuando se entregue el extenso informe final del acto de exhumación.