El parlamentario realizó un viaje por Latinoamérica para constatar la influencia de China en el continente, así como las consecuencias del éxodo masivo de venezolanos. Confiesa que la guerra comercial afecta a su país y que el gigante asiático está tratando de «ganar» el conflicto de poder del siglo XXI
El senador estadounidense, Rick Scott, afirmó, en un texto publicado en el medio norteamericano CNBC, que el presidente de China, Xi Jinping, «conoce lo que Nicolás Maduro le está haciendo a los venezolanos», y que a este no le importa y participa en el «genocidio que está perpetrando» el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro»
Xi Jinping «sabe que él (Maduro) está intencionalmente matando a su gente de hambre, usando fuerzas de seguridad cubanas para eliminar disidentes y golpear a niños en la calle. A Xi no le importa», explicó.
Para el senador, China respalda al mandatario venezolano, en conjunto con Rusia, Cuba e Irán, para «beneficiarse» de la economía y las reservas naturales de petróleo y minerales que gozó Venezuela «antes de la tiranía de Hugo Chávez y Nicolás Maduro» y cuando está vuelva a esa riqueza, «usarla como suelo (base)».
Scott relata un viaje que hizo a través de Latinoamérica para conocer el efecto de China en el continente, y para también constatar la realidad venezolana con respecto al éxodo masivo que, según cifras del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur), ha ascendido a más de 4 millones de venezolanos.
«No sólo la policía está causando la muerte de miles de su gente, Maduro también creó una crisis de refugiados de millones de personas que huyen de su régimen brutal», afirmó.
En el texto, el estadounidense afirma que a 3 mil millas del sur de Bogotá, en Argentina, China construyó instalaciones nucleares como parte de un préstamo por de 10 billones de dólares hecho con el presidente Mauricio Macri.
Denuncia que China es un mal actor y que tiene un propósito para hacer las cosas y es «ganar terreno en el continente americano, a costa de todo, así sea apoyar a un dictador. China no es nuestra amiga, y está tomando los pasos necesarios para ganar el gran conflicto de poder del siglo 21».
El senador confiesa que la guerra comercial con China está causando «dolor» en su país, pero afirma que es necesario para poder combatir el gran «enemigo geopolítico» que es China.
Respalda las acciones del presidente estadounidense Donald Trump y considera necesario «aumentar la influencia» en Latinoamérica y el mundo para apoyar el mercado estadounidense.